Esta foto de Gilberto Charry, que me cede gentilmente mi amigo Alberto Lopera es significativa.
Fue un 28 de enero de 1973 en La Macarena de Medellín. El triunfador de la corrida fue el torero tolimense al cortar la única oreja a una corrida muy complicada de Rocha ( vivía don Benjamín, el patriarca ) y don Jaime Ostos embriagado de emoción alza en hombros al torero colombiano en un detalle inédito de una figura. El otro alternante fue El Viti que mas allá de su majestad esa tarde ( como ocurre a todos los toreros de vez en cuando ) estuvo fatal y abroncaron al salmantino. A Charry y a Ostos, por el detalle, los ovacionaron. El Viti y Ostos , para nuestra fortuna, viven.
Sin duda una foto histórica.
La foto es de Gilberto Charry en un desplante en la plaza La Macarena donde toreó en las ferias de 1971 y 1973.
En un cartel de banderilleros que compartió con los maestros Paquirri y Ángel Teruel, tuvo una destacada actuación este valiente torero tolimense.
Era espinaluno (el Tolima grande). Nació en 1948.
Nos duele su partida y es otra herida en el corazón de los taurinos. El Covid se lo ha llevado tras batallar inútilmente contra esta horrorosa pandemia.
Se vinculó a una iglesia cristiana en los Estados Unidos, se apartó del toreo totalmente.
Gerardo, hermano de Gilberto, contó que murió el 22 de febrero pero solo hoy le avisaron a la familia del hospital que había fallecido de Covid.
Otro hermano, Joselito, también fue torero.
Su alternativa de matador de toros fue en septiembre 10 de 1969 Borja – Zaragoza – España.
Tuvo el privilegio de que su padrino fuera el mas grande torero venezolano, César Girón y de testigo Palomo Linares, tan recordado en Colombia.
Los toros, de don Román Sorando Herranz, encaste Juan Pedro Domecq.
La plaza de su tierra, El Espinal, lleva su nombre como reconocimiento de sus paisanos a su trayectoria.
Fue el 23 de septiembre de 1969 cuando con ocasión de las Ferias de Borja se organizó una corrida en la que, con toros de D. Román Sorando Herranz, actuaron dos matadores de renombre como eran en aquellos momentos César Girón y Sebastián Palomo Linares.
Con los que compartía cartel Gilberto Charry que en Borja tomó la alternativa de manos de César Girón.
La corrida fue posible porque aquel año Palomo Linares y El Cordobés se enfrentaron a los empresarios taurinos y decidieron actuar, por su cuenta, al margen de los circuitos habituales.
Con el sobrenombre de “los guerrilleros” lidiaron numerosas corridas en plazas portátiles como la de Borja.
Donde, inicialmente, estaba prevista la presencia de los dos que, finalmente, se concretó en la de Palomo Linares, acompañado por los matadores antes citados.
César Girón había nacido en Maracay (Venezuela) y pertenecía a una dinastía de toreros de la que han formado parte sus hermanos Curro, Rafael, Efraín y Freddy.
Había tomado la alternativa en Barcelona, en 1952, por lo que cuando llegó a Borja gozaba de un prestigio consolidado. Falleció a consecuencia de un accidente de tráfico, cerca de Caracas, en 1971.
Tras su alternativa en Borja toreó en muchas plazas americanas, alcanzando cierta notoriedad.