En Cali lo abuchearon y en Manizales corearon su nombre y acompañaron con olés mientras el rockero argentino daba unos lances a la verónica en el escenario.
La noche dominical
En la capital de Caldas la historia fue más positiva, teniendo protagonismo Taurojoven. A falta del señalado saco rojo, estos le facilitaron un capote con la palabra ‘Libertad’, que Calamaro tomó en sus manos para luego hacer los movimientos típicos de una faena.
Vestido de negro, con gafas y gorra, Calamaro pareció con el traje de luces; lo que el público celebró mientras decía «olé» una y otra vez. Al final agradeció y se marchó del escenario.
