Orgulloso, pero «entristecido e indignado» se ha mostrado este jueves el torero Julián López, El Juli por la decisión de Ernest Urtasun de suprimir el Premio Nacional de Tauromaquia 2023, un premio que recibió este jueves de la mano de los reyes y ante la ausencia de aplausos del ministro de Cultura y del secretario de Estado, Jordi Martí Grau.
Usted no aplaude ministro, yo le saludo, expresó educadamente el torero.
La polémica ha llegado cuando Urtasun, y el secretario de Estado, Jordi Martí Grau, se han negado a aplaudir a los dos Premios Nacionales de Tauromaquia que se han otorgado: «La educación es lo primero», señaló El Juli al finalizar el acto.
Los reyes Felipe VI y Letizia entregaron en el Museo Reina Sofía los Premios Nacionales de Cultura concedidos en 2022 y 2023 a un total de 65 galardonados, entre los que figuraban el otorgado a la Casa de Misericordia de Pamplona y al torero El Juli, reconocido el pasado año por su retirada de los ruedos.
Se trata de los dos últimos premios nacionales de Tauromaquia, ya que en 2024 no se convocará después de que el Ministerio de Cultura lo suspendiera el pasado mes de septiembre atendiendo «a la necesidad de adaptar los Premios Nacionales a la evolución del sector creativo y cultural en atención a las demandas sociales».
En declaraciones a los medios de comunicación al final del acto, el Juli ha destacado su orgullo por recibir este premio «muy importante para el sector, para el mundo de la tauromaquia» pero también «entristecido y bastante indignado» porque el ministro de Cultura, ha dicho, «haya decidido de manera unilateral prescindir de la tauromaquia, excluirla de una manera totalmente injusta».
El Juli, que no duda de que «cuando se restablezca el orden y la justicia volverá» el Premio Nacional de Tauromaquia, ha considerado que suprimirlo es «censurar parte de nuestra historia».
La obligación de Urtasun como ministro «está en fomentar y en dar a valer nuestras culturas, nuestras tradiciones y la cultura no la decide él, la decide el pueblo, que no es de izquierda, no es de derechas, es de la gente que le gusta la tauromaquia», ha insistido.
Por último, el madrileño quiso mandar un mensaje: «Soy el último torero en recibir este premio tan importante y estoy seguro que volverá la cordura, la responsabilidad y que en un futuro próximo muchos compañeros lo volverán a recoger de manos de un ministro con educación q no censure nuestra profesión».
LOS PROFESIONALES RODEAN AL JULI