Hoy, a las 12 y 30 del día de Colombia vuelve en su segunda tarde de 2022 sólo (y solo) con cuatro toros rodeado de expectación y rumores tras el fiasco de Jaén, dice El Mundo en su sección taurina.
ALVARO DE LA CALLE, SOBRESALIENTE
El sobresaliente para el festejo será el salmantino Álvaro de la Calle, que ya destacó el pasado 10 de abril en la plaza de toros de Las Ventas durante la encerrona de Emilio de Justo, que resultó herido en el primero de la tarde y por el que tuvo que lidiar el resto de ejemplares en solitario.
El tsunami de las (re)aparición tomistas inunda ya la costa mediterránea después del desencanto que supuso su regreso en Jaén, también colapsado, eso sí. El rostro enjuto de José Tomás cuelga de banderolas en blanco y negro por todo Alicante anunciando el «Tendido Único», el evento paralelo creado para arropar el «acontecimiento» de este domingo: la segunda y última cita de la temporada (sic) de José Tomás. El negocio de JT funciona. Todo lo que rodea el showbusiness. Como el formato impuesto a estas sus dos apariciones. Sólo cuatro toros. Solo JT. Las 11.100 entradas que salieron a la venta se agotaron en 20 minutos. En un verano donde los llenos se van a concentrar en Pamplona, es un notición. Pero no es eso, no. Desde 2018 -la pandemia sangrante mediante- será su cuarta tarde en cinco temporadas…
La hostelería, con 28.100 plazas reservadas en hoteles y apartamentos, bate récords que no alcanzaba desde la última visita de José Tomás (2016). Según el Patronato de Turismo de Alicante, el fenómeno JT arrastrará peregrinos de 44 provincias españolas y 9 países, entre los que se encuentran México, fiel feudo tomasista, y Reino Unido, EE.UU., Alemania y Luxemburgo… El eco entre los mitómanos es grande, más que ya la repercusión taurina. Algunos fieles, los menos, se han borrado. Semejante maremagno acudiendo en tromba a la llamada de José Tomás va a traducirse en un impacto económico para Alicante de 3,5 millones de euros. Dicen que la bolsa en Jaén para el torero fue de 800.000 euros, cifra similar a la que se embolsará en Alicante. Pero el entorno de JT siempre ha sido fecundo en rumores. El penúltimo es que puede ser su última tarde.
Es imposible pasear por las calles de Alicante o Valencia para un espectáculo que traía el «no hay billetes» colgado desdesde su confección. Lo que mueve un tío solo y con sólo con cuatro toros. (Quizá) la apuesta por visibilizar el toreo en tiempos del animalismo feroz debería ser ejemplo para otras plazas, ferias o incluso abonos. Y (quizá) José Tomás, dueño de sus silencios, de su destino, de su economía, podría serlo también de un compromiso hipocrático que no ejerce en plaza de mayor responsabilidad como Valencia, Sevilla, Madrid, Bilbao, Málaga o el mismo Puerto de Santa María de estos días.Como marcos también de mayor categoría. El «acontecimiento», la exhibición, el solo, con sólo cuatro toros, volverá a contar con una gran repercusión mediática del torero menos mediático. O quizá no tanto.