El 15 de junio en La Santamaría, en Manizales, en Cañaveralejo y en La Macarena se hará sobre las 6 y 30 de la tarde un velatón por la muerte de las ganaderías ante el proyecto prohibicionista que logró en el Congreso poner fin a las corridas ( claro , es preciso esperar pacientemente el curso que tendrá la demanda ante la Corte Constitucional de la Ley , pues aun el proceso para poder hacer las corridas no está cerrado ).
En Valencia, España, en el proceso de desencajonamiento dos toros de Miura se pelearon y murieron. Los antitaurinos en nuestro país están utilizando de manera equivocada ( para no emplear otro término ) para sus fines prohibicionistas .
Por qué se pelean los toros ?
Don Gonzalo Sanz e Santamaría de la ganadería Mondoñedo explica
«..El toro de lidia es un animal de combate y con mucha frecuencia se matan entre ellos. Por eso los ganaderos los apartamos en lotes de dos o tres para disminuir el riesgo de la pelea.
A medida que crecen y se vuelven fuertes y hay lo que se llama más dominancia son más frecuentes las peleas,
Nuestra labor en el campo es separarlos permanentemente y esa labor la realizan mayorales y vaqueros experimentados…
El trato que le damos al toro en las dehesas es sencillamente impecable..»
Son varias las historias de toros que vivieron cerca de la casa de campo del ganadero, que, para expresarlo en lenguaje popular, » andaban como Pedro por su casa «.
Es el caso de «Romerito» y el maestro Antoñete. Fue su fiel mascota durante 11 años, hasta que un tumor se llevó por delante al gran semental. Su muerte, en 2004, fue el motivo que llevó a Antonio Chenel a vender su ganadería. Es la increíble historia de una relación que comenzó cuando, misteriosamente, «Romerito» no embistió al matador como un toro bravo, sino que prefirió comerse las bellotas que vareaba bajo una encina de su finca.
Recordar la película » El niño y el toro» . Narra el amor que siente un niño mexicano por un toro bravo al que cuida desde que éste nace, y al que intenta salvar la vida cuando está en la plaza de toros a punto de ser toreado por un famoso torero.
Pue este domingo Juanito Ortiz , torero de Ubaté , lidió en cuarto lugar en la portátil en Lenguazaque a «Caluroso» un bravo, noble, entipado y serio ejemplar que el mayoral Carlos Galvis , de Salento ,en el valle de Cocora en el Quindío donde pastan los Murube-Santacolomas, alimentó con biberón en la casa de la ganadería. Todo ocurrió por la muerte de la vaca-madre » La Ardida» de la familia de «Las Quemadas».
Puede parecer una contradicción pero los misterios de la genética de que hablaba el abuelo de los ganaderos Antonio y Mauricio González, Ernesto González Piedrahita, producen estos irrepetibles momentos en las dehesas y muestran esa riqueza de matices de la crianza del toro bravo.
«Caluroso» fue un gran toro la tarde-noche de este domingo en la bucólica Lenguazaque, animal que alimentó con biberón un juicioso hombre de campo como para las historias de » Cuentos del Mayoral»
Salento no es solo ese bello municipio quindiano donde tandas tardes he estado en su plaza disfrutando de su aromático café y arrobado por el paisaje que he admirado caminando muchas veces entre sus fuentes de agua y caminos antiguos , es también el nombre de una ganadería que tiene sus raíces en un prohombre, don Ernesto Gonzalez Piedrahita y que sus hijos, nietas, nietos y biznietos, biznietas prolongan allí , en el Valle y en el Cauca.
Y esa ganadería no solo levanta una especie maravillosa ( Murube- Santa Coloma) en un ejercicio de alquimia de los Gonzalez Rincón como lo hacen todos nuestros criadores en una silenciosa, paciente , sacrificada tarea que empieza al despunta el sol y hasta que el astro rey se pierde por el occidente. Es decir , es el aporte que en más de cien años nuestros ganaderos de bravo le ha aportado a la genética.
Y fundadas preocupaciones me aslsten por ese hermoso Valle de Cocorá que desaparecido el toro bravo se convertirá esa reserva natural en un muladar y ojalá nunca ocurra se destruirá nuestro árbol nacional, la palma de cera.
Es esa tarea prolija en el campo que convierte al toro en un guardián del eco sistema y, mucho me temo que si los impúdicos prohibicionistas logran su nefando proyecto, el toro se extinguirá y con él un valioso legado de los abuelos…
Espero que los herederos de Ernesto Gutierrez; Juan Bernardo, sus hijos,, Carlos Barbero, la familia Rocha, César Rincón , Kike Alvarez, Ernesto González , Jorge Gutierrez, y tantos y tantos ganaderos de provincia que han hecho su valioso aporte a la sociedad.
Si revisan los proyectos prohibicionistas lo que menos les importa a los antis es el toro que dicen proteger. Porque muere el toro, vive esa especie
DICE CONTEXTO GANADERO
En la arena, el matador se prepara para recibir la última embestida del toro de lidia, aquel gladiador de por lo menos media tonelada de peso. Es el momento final de la faena, pero el punto de partida de otro proceso: la comercialización de la carne del semoviente. Porque sí, a pesar de las creencias populares, la carne del toro sacrificado en el ruedo es 100 % apta para consumo humano. Es más, comparado con el cárnico proveniente de los toros de ceba, el del animal que sale de la plaza tiene una calidad muy superior debido al cuidado y dedicación que tuvo en la crianza.
Luis Alberto Centenera, veterinario y autor de una tesis doctoral sobre las concentraciones de hormonas opiáceas y su relación con la respuesta al dolor en el toro de lidia, indica que “sin duda alguna, la raza de lidia está seleccionada para un objetivo fundamental: la lidia (la acción de torear a un toro, según la Real Academia Española)». Añade que “[de no haber existido festejos taurinos] hoy quedaría como una raza de animales exóticos en los zoológicos o desaparecerían”, añade.
Y ojalá estos actos litúrgicos como el tentadero puedan seguir existiendo como se acaba de hacer en Salento en el Valle de Cocorá
Y ahí están Luis Reyter, los ganadero hermanos Antonio y Mauricio, Lopehillo , entre otros
Mas allá del juego de «Sosito», serio, con cara, de lomo recto, número 18, 537 kilos, de la buena corrida de Santiago Domecq , el sexto, lidiado por Ginés Marin en Dax, un dato curioso : Este toro es hijo de la segunda vaca mas vieja de la casa, la número 298 y el pelo jabonero le viene por el semental, hijo de «Ilusión» de Juan Pedro, origenes veragueños
El «40 » , Ilusión ,de don Juan Pedro es el padre del famoso jabonero «120», «Gracioso» propiedad de don Jerónimo Pimentel y que » se ha regado» en varias ganaderias americanas. Tanto el «40» como el «120» murieron.
Bueno el lote de Juan Leal y Perera lote que transmitió menos aunque su segundo fue bueno por el izquierdo. Y Ginés una de cal y otra de arena.
Sosito . también jabonero de capa, fue el garbanzo de la interesante corrida de don Santiago hoy en la plaza francesa de Dax en la que el resultado es el siguiente :
Toros de Santiago Domecq.
Miguel Ángel Perera, silencio en ambos.
Juan Leal, oreja y división de opiniones
Ginés Marín, oreja y tibias palmas
El 29 de enero de 2006 en la Monumental de México, el toro «Pajarito» saltó del ruedo a la segunda fila.
El día de hoy se cumplen 15 años en que “Pajarito”, un toro de lidia de la ganadería de Cuatro Caminos, saltó del ruedo hasta la segunda fila de barrera de sombra durante la Temporada Grande 2005-2006 en la Monumental Plaza de Toros México.
El toro cruzó el ruedo a toda velocidad y cerca de la barrera dio un salto, apoyándose con las patas traseras. Superó una altura de 2.26 metros y una distancia de 2.22 metros.
El animal de la ganadería de Cuatro Caminos, voló por los aires para aterrizar en la segunda fila de barrera de sombra durante la Temporada Grande 2005-2006.
En ese instante el terror se apoderó de los presentes, muchos de ellos conocidos del ámbito público. Todos los asistentes de ese sector, comenzaron a correr despavoridos y el toro vuelto loco atacaba a quienes tenía cerca.
Minutos más tarde lograron controlar la situación dándole una estocada final a “Pajarito”.
Contó Vicente Miró:
Un minuto. Fue el intervalo que transcurrió desde que ‘Pajarito’ atravesó la puerta de toriles hasta que un mozo del torero Pablo Hermoso lo descabelló entre las butacas de un tendido de sombra de la Monumental de México D.F.. Sesenta segundos que valieron para que el astado cárdeno de 502 kilos de peso y cuernos cortos se convirtiera popular en intenet.
Más de 20.000 espectadores contemplaban la corrida aquella tarde del 29 de enero de 2006. Faltaba una semana para que la plaza más grande del mundo cumpliera sesenta años en activo. La puerta de chiqueros se abrió y el toro salió como una estampida, ligeramente orientado hacia el interior del coso.
El joven Xavier Ocampo esperaba en las tablas a que al animal que confirmaría su alternativa. Pero recorrida casi la mitad del diámetro de la plaza, ‘Pajarito’ cambió el viaje y se enfiló hacia el burladero de prensa. Después, un brinco que puso sus cuartos sobre las tablas; uno más y volaba hacia la barrera.
«Fueron momentos dramáticos para todos, pero emblemáticos para la fiesta», explica el torero y medallista olíompico de natación Luis «Niño de Rivera». Más de 25 personas resultaron heridas, aunque nadie perdió la vida en el lance.»Todos los aficionados nos sentíamos protegidos por la barrera y el callejón hasta que llegó ‘Pajarito'».
En ese momento, con un animal que no tenía más fiereza que la indispensable por su tamaño y cuernos desde que abandonó de un brinco la arena, los espectadores sintieron un cambio en su «relación con el torero y con el toro». Sintieron «el peligro, la posibilidad de la muerte que es la esencia del arte taurino».
Sergio Hernández Weber, propietario del hierro al que pertenecía el toro, ‘Cuatro caminos’, ha decidido recomponer la historia de ese minuto y publicarla en un libro repleto de ilustraciones: «Pajarito. El vuelo histórico».
Aunque en febrero lo dio a conocer en México, decidió realizar su propio vuelo, esta vez transatlántico, y repetir la presentación en la sala Antonio Bienvenido de la madrileña Plaza de Las Ventas.
Se trata de un volumen de 125 páginas en el que ha colaborado Heriberto Murrieta, cronista taurino y compatriota del ganadero. Su interior recoge noventa fotografías de diversos periodistas, cinco pinturas y los testimonios de varias personas que vivieron la proeza en directo.
Emocionado recuerdo de Juan Bautista de un gran toro santacolomeño de Ernesto González. Juan Bautista Jalabert ha revelado en Mundotoro que tiene un nuevo hierro en cercanías de Arles, formado con vacas y sementales de una de las fuentes de la casta brava, el Santa Coloma, vía La Quinta a raíz del indulto de un toro de nombre «Golosino»! que además tentó años después (Por eso en recuerdo de la madre de ese astado su finca lleva el nombre de «La Golosina».
SU RELACION CON COLOMBIA.
Emociona el recuerdo del torero francés por un toro de don Ernesto Gonzalez lidiado en Cali.
Por eso la experiencia de Juan Bautista con el encaste Santa Coloma – Buendía no se reduce sólo a ‘Golosino’, ni a la divisa propiedad de Martínez Conradi, tal y como rememora el propio diestro. ‘De La Quinta, como ya he comentado, era el toro al que corté el único rabo concedido en Mont de Marsan; en Nimes también cuajé un toro importante de esta ganadería, tengo en casa cuatro o cinco cabezas de toros de La Quinta que han sido muy importantes para mí.
Luego, también tuve encuentros muy bonitos con toros de otras ganaderías de esta rama: indulté un toro de Rehuelga hace unos años en Sotillo de la Adrada, tengo un recuerdo muy bonito con un toro de Ana Romero en Azpeitia, y en América, además de la ganadería de Ernesto González Caicedo, en Colombia, una de las faenas que más a gusto cuajé allí tuvo lugar en Mérida (Venezuela) a un toro de La Cruz de Hierro, que le corté las dos orejas y me llevé el premio a la mejor faena de esa feria… quiero decir que, aparte de los toros de La Quinta, he tenido encuentros muy bonitos con otros toros de esta misma estirpe una vez que tenía el oficio necesario como para entenderlos’.
La historia del semental «Rayito» el último toro indultado en Barcelona, hoy cerrada para la fiesta. Amamos la fiesta brava por muchas razones entre otras por esa inmensa valoración que le damos a la bravura, a la casta y que el indulto hace parte de nuestro ADN.
El toro se ha entregado en el ruedo, ha probado en varas su casta, ha desarrollado una impecable batalla en la muleta embistiendo por abajo, entregado.
Miguel Tendero hace 10 años indultó a «Rayito», de Valdefresno, 4 días después de que el parlamento Catalán prohibiera las corridas en esa provincia.
Mas tarde el Tribunal Constitucional echó abajo tal decisión pero no ha ido posible reabrir la monumental de BARCELONA.
La Gaceta taurina de Salamanca ha encontrado al toro en la ganadería, y cuenta maravillosamente esta hermosa historia de un toro (ya entrado en años y que ha dado todo incluida la parentela) .
Camina por los cercados de Valdefresno con la historia a cuestas.
En la paz del campo. Pisa la paja seca que ha agostado los sofocantes calores del verano. Ajeno a todo. Con los pasos cortos y lentos de una vejez bien ganada.
Las arrugas de la fuerte y astracanada piel del cuerpo delatan su avanzada edad, igual que su impresionante testa, con la aparatosa cornamenta redondeada ya, desgastada y amarillenta por el paso del tiempo.
Tiene la mirada triste que impone su anciandad. Sólo quien la ha visto de cerca sabe lo que eso esconde. Y de ahí brota una luz tímida, y a la vez noble, del que ya ha visto pasar casi todo ante sus ojos.
María Fraile va a verle todos los días.
A Rayito ya le cuesta andar por unos problemas en las manos y es la joven ganadera de Valdefresno, quien le lleva la ración diaria de tacos con los que sigue alimentándose. Se han hecho casi confidentes.
Deja que se acerque dentro de un silencio que llena el inmenso escenario de la paz del campo. Allí ambos se respetan con una mirada de complicidad. Él rumia a cámara lenta mientras ella trata de adivinar los secretos que le hubiera gustado descubrir de la mano de su abuelo.
Rayito guarda en sus genes la bravura que seleccionó el inolvidable Nicolás Fraile, el sheriff de Valdefresno, que viajó a la eternidad de los grandes ganaderos nada más estrenarse 2014. Y es, ahora, una de sus nietas quien mima una de sus obras de referencia.
Rayito se convirtió en todo un emblema hace una década.
La bandera del toreo ante uno de los ataques más crueles que se perpetraron en la tauromaquia. A partir de un cambalache político se aprovechó un momento de debilidad para poner fin a sabrosa y legendaria historia de los toros en Cataluña.
Solo cuatro días después de que se votara, y aprobara en el parlamento (28 de julio de 2010), la prohibición del toreo en esa comunidad, Rayito fue el protagonista histórico de una tarde memorable en la Monumental.
El de Rayito fue el mejor grito del toreo en plena fiebre de un debate tan absurdo como injusto. El toro de la ganadería salmantina de Valdefresno puso sobre el histórico ruedo del antiguo coso de El Sport (1914), rebautizado años después, gran parte de la grandeza de este espectáculo en el que el toro es el gran y principal protagonista.
Sobre el que gira todo y el que le da argumento a esta Fiesta.
“Por respeto a todo lo mucho y bueno que nos dio hemos decidido dejarlo con nosotros hasta que aguante”, dice José Enrique Fraile
“Rayito, sigue en los cercados de Valdefresno junto a un lote de vacas, pero ya ha dejado de cubrir. Se ha hecho mayorcito pero por respeto a todo lo mucho y bueno que nos dio hemos decidido dejarlo con nosotros hasta que aguante”,
comenta José Enrique Fraile.
Lo mantienen con el lote de vacas para evitar juntarlo en cercados con otros toros sementales para evitar que le pudieran pegar, porque él ya apenas puede defenderse: “Anda por todos los sitios libre, a su aire. Hace lo que quiere y puede…”, comenta el ganadero de Valdefresno.
Rayito ha estado cubriendo las vacas de Valdefresno, cinco o seis años, desde el invierno inmediatamente posterior al indulto (2010-2011) de aquel verano triunfal en Barcelona: “Luego, hace ya tres o cuatro años, le entró artrosis en las manos y le costaba subirse a las vacas y ya dejó de cubrir”.
Aún así dejó buena simiente en la ganadería:
“Lo daba muy bravo, pero tenía un problema. Su genética nos daba los toros con las caras (afirma en referencia a la cornamenta) muy abiertas y eso, hoy en día, es un problema para poder lidiar porque va en contra de la tendencia actual y no gusta a los toreros. Por eso decidimos echarlo con medida”.
Curiosamente, en su día, cuando aún era un eral (dos años), Rayito estuvo a punto de ser tentado en la finca para semental por la gran reata (toros y vacas precedentes de la misma familia que habían demostrado un gran nivel) que llevaba pero se desestimó su lidia porque a los ganaderos no les terminaba de convencer la cara.
Sin embargo, cuando se cuajó y ganó en edad, obtuvo el cuerpo y la seriedad suficiente como para ser lidiado en una corrida de toros en un coso de primera, como es la Monumental de Barcelona.
Allí saltó el 1 de agosto de 2010, en el primer espectáculo que se celebró nada más aprobarse la prohibición taurina en Cataluña, el miércoles inmediatamente anterior.
Barcelona seguía siendo entonces plaza de temporada, con funciones taurinas cada domingo, aunque lejos ya de aquella explosión de los años 50, 60 ó 70 en las que había toros todas las semanas en sesiones de jueves y domingo con las primeras figuras y llenos de reventón, siendo Barcelona y su plaza de la Monumental una de las de referencia del curso.
Fue, por ejemplo, el coso en el que más paseíllos hizo en toda su carrera el maestro Santiago Martín ‘El Viti’, uno de los preferidos de aquella afición.
Y así, con toda su leyenda, Rayito (negro, número 93 y del guarismo 6) sigue deambulando por los cercados de Valdefresno. Protagonista de una triunfal pero a la vez triste tarde que ya forma parte de la historia.
Se convirtió entonces en el tercer toro que se indultaba en la ganadería, tras los precedentes de los astados que se ganaron la vida en el ruedo, Cara Alegre en Béziers (Iván García) y Pitito en Palencia (Perera).
Ambos murieron al poco tiempo al no lograr recuperarse de las heridas. Rayito sí lo hizo, dejó su descendencia y hoy saborea su vejez en Valdefresno como uno de los orgullos de la casa.
De la prohibición en Cataluña al pañuelo naranja al toro de Valdefresno en 4 días
“Fue de los días más emocionantes que he vivido en mi vida en una plaza de toros”, comenta José Enrique Fraile, en recuerdo de aquella tarde del verano de 2010 en la Monumental de Barcelona en la que Miguel Tendero indultó a Rayito, premiado con el pañuelo naranja que distingue a los elegidos.
“La plaza bramaba con la bravura del toro, era un momento de reivindicación de todos los aficionados que estaban muy dolidos con la decisión que prohibía las corridas de toros en Cataluña, y los de allí más todavía, claro. Fue la mejor manera de reivindicar el espectáculo”, comenta al ganadero de Valdefresno.
“Lo que se vivió en la plaza fue muy emocionante, con toda la afición gritando a la vez ¡Libertad, libertad! Era un triunfo histórico. Sin saberlo, Rayito estaba entrando en la historia”, recalca José Enrique Fraile.
“Fue un cúmulo de sensaciones muy grande. Un recuerdo que me quedará para siempre”.
En aquel momento, Valdefresno era una de las ganadería habituales cada temporada en la Monumental. Aquella tarde del 1 de agosto de 2010 hicieron el paseíllo Juan José Padilla, Curro Díaz y Miguel Tendero.
Este último fue el encargado de lidiar a Rayito, que saltó al ruedo en tercer lugar. Y entonces fue cuando se produjo la explosión derivada de la bravura de un toro que defendió con orgullo su vida y se ganó el derecho al volver a Valdefresno para perpetuar su bravura para siempre, además de convertirse en uno de los toros legendarios de la historia.
Una vez que regresó a los corrales, aún con la efervescencia y al emoción de la gente patente en el ambiente, Rayito recibió las primeras curas en la plaza y allí permaneció tres días más.
El miércoles deshizo de nuevo el camino desde Barcelona hasta la finca salmantina de Valdefresno, en Tabera de Abajo. Recorrió en camión de nuevo los casi 900 kilómetros que le separaban de su paraíso eterno.
Nicolás Fraile le esperaba esa noche de verano, junto a sus nietas, con los brazos abiertos.
Joaquín Galdós indulta un toro de El Pilar en Astorga (León). Segundo festejo de la feria. Con más de media entrada del aforo permitido, se lidiaron toros de la ganadería de El Pilar.
El sexto, de nombre ‘Potrico’ y herrado con el número 64, fue indultado; y el quinto de nombre Deslumbrero fue premiado con la vuelta al ruedo.
UCEDA LEAL, ovación y oreja; JUAN LEAL, dos orejas y dos orejas con petición de rabo; y JOAQUÍN GALDÓS, oreja y dos orejas y rabo simbólicas.
Javier Lorenzo nos resume una tarde fantástica de buen toreo del peruano y un gran toro.
Joaquín Galdós ha indultado a Potrico, un toro de la divisa salmantina de El Pilar, en el festejo que se ha celebrado esta tarde en la plaza de toros de Astorga (León).
El francés Juan Leal protagonizó una tarde de rotunda autoridad.
Faena de imponente valor a su primero, al que cuajó de manera formidable, por el pitón derecho poniendo al público en pie, que enardeció tras una gran estocada.
Al quinto, que derribó al caballo, también lo desorejó después de realizarle una faena de extraordinaria calidad y muy completa en el que puso la plaza en ebullición.
El público le llegó a pedir los máximos trofeos de un toro extraordinariamente bravo.
Tres y un rabo simbólico paseó el peruano Joaquín Galdós.
Firmó una faena de gran estética al tercero, aunque un pinchazo previo a la estocada le dejó el premio en un solo trofeo.
Sin embargo, en el sexto alcanzó el triunfo de la tarde, después de torear a placer a «Potrico».
Un fantástico toro de la ganadería de El Pilar, al que se le terminó concediendo el indulto, tras una faena de gran emoción, intensidad y buen toreo.
Fundidas con la clase y la entrega de un animal para el recuerdo.
Poco pudo hacer Uceda Leal con el flojo primero, mientras que al cuarto le firmó un trasteo con pasajes de calidad, para finiquitarlo de una gran estocada.
La desolación que va dejando el Covid-19 son plazas cerradas, aficiones desnortadas, empresarios que no saben si podrán o no rearmar este rompecabezas, toreros, cuadrillas, parados.
Pero lo mas grave y doloroso: 50 mil cabezas de vacas al matadero en España y ni una voz de condolencia de los llamados animalistas o como dice sin que se le caiga un pelo una concejal partidaria de acabar las corridas: «Son costos que hay que asumir».
En Colombia está «en veremos» la feria del sol y del acero en Sogamoso en julio, una novillada en La Santamaría en agosto y varias ferias en provincia, sin que sepamos aun qué rumbo tomará la feria de Cali este fin de año.
«A nosotros los ganaderos cada vez que tenemos que actuar como no queríamos (el matadero) es perder una ilusión, es un golpe moral, psicológico pues es una historia de varias generaciones lo que se pierde pues el golpe económico lo arrastramos hace tiempo.
Es toda una historia de genética que es irrecuperable», me dice en su reflexión Gonzalo Sanz de Santamaría.
Expresa el torero valenciano Román en diálogo con Raquel Barba :
«Me ha dado muchísima pena porque sabes que muchos toros van a ir al matadero. En el primer tentadero que hice, en Fuente Ymbro, me dio pena ver a los animales y pensar que esos toros tal vez no podrían llegar a la plaza, que probablemente acabarían en el matadero».
Victorino Martin pone en valor esta crisis :
«Desde la guerra civil no se ha conocido nada tan grave. Aquí nadie sabe qué sucederá. Tenemos que ser responsables y cumplir las recomendaciones sanitarias, sino las consecuencias serán mucho más dramáticas para la economía y para todo».
Enrique Ponce apunta:
Los toreros están “comprometidos y concienciados”, según ha resaltado, y están “abiertos” a la reducción de aforo, pero critica que en el cine, por ejemplo, la distancia sea de un metro y medio y en las corridas de toros se amplíe a nueve metros, al tiempo que destaca que el toreo es uno de los espectáculos “con más asistencia de público” y de los que “más dinero mueve”.
Antonio Bañuelos, presidente de la Unión de Criadores de toros de lidia, reflexiona sobre esta crisis :
Es el peor momento de la historia del mundo del toreo, sin duda alguna. Ni guerras, ni pandemias, ni la crisis del 2008 llegó a suspender una temporada prácticamente entera y en el almacenamiento de un producto perecedero, como es el toro de lidia que tiene una edad limitada y que además consume todos los días.
Es una pérdida continuada cada día que pasa y va a tener a finales de temporada unas consecuencias muy graves porque lleva consigo cerca de 100.000 personas de población rural especializada.
La repercusión va mucho más allá, va a todas las fiestas y ferias de España
donde produce una repercusión de cerca de 4.000 millones de euros que dejan de ingresarse. Va a ser muy grave la salida del 2021 con una economía muy debilitada.
Hay que devolver un poco de todo lo que la tauromaquia me ha dado como miembro de este oficio, de ganadero, con toda la ilusión del mundo y este excepcional equipo de directivos vamos a intentar dar una vuelta por completo para que podamos autorregularnos en parte, y si los ministerios siguen sin recibirnos y tener la cobertura y el amparo que necesitamos, tendremos que aspirar a hacer una federación como es el fútbol, el baloncesto o el resto de los espectáculos.