No es un secreto las amenazas de los fundamentalistas a un ceremonial antiguo como la tauromaquia, a la irrigación de beneficios en la economía para las regiones, el sustento de centenares de familias, el empleo, para no hablar de la cultura , de las tradiciones, del sustento popular y la gravedad de que si en Colombia gana el criterio animalista , desaparecerá una especie única , el toro de lidia , pues los proyectos que cursan en el Congreso prohíben los tentadores, las corridas de toros, de novillos, rejones.
Don Alberto García hizo una necesaria exposición en Mundotoro para convocar a la solidaridad del mundo taurino europeo y americano para apoyar los esfuerzos de los taurinos colombianos por mantener vivo el ritual.
No tiene desperdicio lo que afirma el taurino español. Con la venia del portal :
‘Cali y Manizales son los bastiones de Colombia. Si cayesen ambas, detrás vendrían otros países. Si somos capaces de mantenerlas, en un futuro, con un giro político, se puede cambiar la situación. Fuera de esas dos plazas, en Colombia se han perdido la mayoría. Sólo hay cuatro o cinco pueblos, pero hay que mantenerlos apostando para el futuro’, sostiene el CEO de Tauroemoción.
‘Sobre esta problemática no tendría que estar yo sólo como empresa afrontando el esfuerzo de tirar hacia adelante la feria, sino una agrupación del sector y un ente potente, que a día de hoy no existe, para intervenir en los lugares en los que la Tauromaquia corre peligro por la política y los lobbies antitaurinos’, sostiene.
Aun así, en Cali todos unen fuerzas para que la Tauromaquia siga viva. ‘Desde la propiedad de la plaza, una vez se acabó el contrato, me pidieron el favor de hacer un esfuerzo y seguir organizando la feria. Ellos también han hecho un esfuerzo grande, poniendo a cero el alquiler de la plaza de toros. Pero, con todo eso, es muy difícil mantener un equilibrio económico’, asegura Alberto García.
‘La verdad es que, taurinamente hablando, más allá de los anunciados, sólo he contado con el apoyo de Felipe Negret, que ha formado parte este año de la sociedad y lo ha hecho sin ningún afán económico, sino por mantener los toros en Cali’, asegura.
A pesar de la situación, Alberto García no cesa en su empeño. ‘Mi plan es ir partido a partido. Es un esfuerzo brutal y un gran reto por los impuestos tan abusivos. Vamos a ver el resultado de este año. Además, es una feria que depende mucho del tiempo, porque es costumbre que se vendan entradas de última hora, el mismo día del festejo. Por lo tanto, estamos en manos del tiempo. Debería se existir una coalición del toreo, una gran federación que desde España diera apoyo al resto de países. Es verdad que existe una Fundación, pero, al final, eso no reúne a los profesionales ni tiene un brazo económico potente para ayudar frente a esta situación’, concluye Alberto García.