Los tiempos que corren no son halagueños para el toreo y la comunidad taurina ha tenido que » mover ficha » ( término popular ) para sobrevivir en tanto pasa este nocivo virus -.
La familia Martínez así lo ha entendido ( como muchas otras desde luego pero ellos son el ejemplo en este caso ) y el padre, Humberto que fue novillero ( compitió siendo ambos muy niños en un espectáculo de Kaliman en La Santamaría con el que sería años después el maestro César Rincón , con todas las letras. Lo curioso es que el que tenía ambientico era Humberto que, mas tarde será padre de David Martínez, uno de nuestro referentes de las nuevas generaciones con triunfos importante aquí y allende las fronteras.
Así que a mas de acompañar a su hijo David como fotógrafo , mozo de espadas, representante, chofer y consejero, en casa se instalaron las máquinas de coser para elaborar capotes, muletas, tapabocas. Lo que haga falta.
Entre tanto, David se sigue preparando de cara a los próximos compromisos en las plazas de provincia y si lo permiten las autoridades de ese país, al Perú donde tiene gran cartel.
En su viaje a Europa, el torero del Valle con ascendencia bogotana aprovechó para contactar colegas, apoderados y empresarios, entre ellos Simón Casas el capitán general de Las Ventas.