Category Archive : Los toros en Portugal

Muriò «Marismeño» que estuvo a punto de quitarle la vida al ganadero Joaquìn Murteira, mas tarde se lidiò indultò y se quedó como semental

Marismeño fue conocido por la cogida en el campo al ganadero en 2019 que le causó serias lesiones.

En agosto del año pasado, fue lidiado en el Campo Pequeño, y por su comportamiento tuvo el merecido regreso a Galeana. Ya en el campo, sufrió cornada de un hermano de capa, de la que nunca se recuperó. El testimonio del ganadero es conmovedor pues cuenta que el toro Marismero muriò como consecuencia de las heridas que le infiriò un «compañero» de camada en el campo.

En el 19, el ganadero portuguès se encontraba en su finca , el toro, por descuido humano, le embistiò y a punto estuvo de quitarle la vida. Luego se corriò en Campo Pequeño y se indultò.

Portugal rechaza prohibir los toros

La Asamblea de Portugal ha vuelto a votar a favor de los toros y desestimó una propuesta para eliminar las corridas en el país luso.

Tras varias exposiciones a favor y en contra, la votación de los parlamentares se saldó con una rotunda derrota de los prohibicionistas, pues votaron en contra los partidos Social Demócrata, Demócratas Cristianos (que forman el grupo mayoritario del Gobierno) Partido Socialista, Partido Comunista y dos ecologistas Los Verdes.

A favor sólo votó el partido Bloco de Esquierda, que propuso la iniciativa. Presentes en las galerías reservadas al público asistieron muchos toreros, ganaderos, forcados y empresarios, siendo muy notable la ausencia de los grupos antitaurinos.

ORIGEN DEL TOREO EN PORTUGAL

Durante siglos los espectáculos taurinos eran un elemento fundamental de la cultura lusa.

Documentos históricos constatan que ya se celebraban corridas de toros en Portugal en el siglo XII, y en el siglo XVI el rey luso exigió la intercesión del Papa cuando un inquisidor lisboeta intentó abolir la actividad.

En el siglo XIX surgió el factor que hoy en día sigue diferenciando la lidia portuguesa de la española: las autoridades prohibieron el sacrificio del toro a vista del público de manera informal, y nació así el ‘toreo a la portuguesa’ –en el que el toro muere en los bajos de la plaza, o directamente en el matadero–. Es decir la muerte se esconde.


  Utilizamos cookies para mejorar tu experiencia en nuestro sitio web. Al seguir navegando, aceptas el uso de cookies. Más información en nuestra política de privacidad.    Más información
Privacidad