“Cavaliros – Marcantes”. Rejoneadores que marcaron una época en Portugal. La fascinante historia del rejoneo portugués
(Luigi Echeverry)
En Portugal a las corridas de toros les llaman “Touradas”. La tauromaquia Lusa en su gran mayoría se compone de lida de toros de acaballo y minoritariamente de actuaciones de matadores de toros. Y aunque allí no se matan los toros en la plaza, en Portugal la historia y tradición de rejoneo es rica y propia de un público muy aficionado y entendido, de maravillosos caballos Lusitanos y de diestros maestros de la equitación clásica que toman la alternativa como caballero rejoneadores o como ellos los llaman “Cavaleiros Tauromáquicos” profesionales, por lo general en la plaza Lisbonense de Campo Pequeño después de hacer una carrera como aficionados.
En Portugal se originan las reglas del rejoneo de los últimos 300 años a partir del famoso Marqués de Marialba quien escribe las primeras reglas para del rejoneo o toreo a caballo, razón por la cual a este arte milenario de jugar con los toros bravos desde las cabalgaduras se le conoce como el “Arte de Marialba”.
El video que presentamos se denomina “Cavaleiros Marcantes”, es decir que se refiere a los rejoneadores portugueses que marcaron una época. En la portada el gran Joao Branco Nuncio quien con Simao Da Veiga marcaron la era dorada del rejoneo portugués a principios del siglo XX en Portugal y en las principales plazas de España.
Quien habla inicialmente es el Maestro Emidio Pinto, rejoneador muy conocido en Portugal en el último cuarto del siglo pasado. Inicia la narración diciendo qué, en principio se corría más con los toros y realmente no se toreaba tanto como se aprecia hoy y lo muestra el primer video en el que vemos a a Joao Riveiro Telles Sr., hijo del también famoso Maestro David Riveiro Telles, padre y abuelo de varios rejoneadores.
Emidio Pinto explica como en el segundo video vemos a Joao Moura Jr., hijo demostrando como con mucha destreza se lidia a un toro difícil metido en las tablas, yendo de frente y saliendo por el rabo del toro.
Pinto habla y vemos en una foto antigua la figura de Joao Branco Nuncio quien es para los entendidos portugueses quien realmente inicia el toreo a caballo desde el punto de vista artístico citando al enemigo de frente y yendo a su cara para clavar en el estribo y haciendo toda la lidia desde el caballo.
Luego vemos un rejoneador en un caballo negro vestido de azul, que demuestra cómo se debe ir de frente a la cara del toro. Este registro nos muestra nuevamente una foto de Branco Nuncio ya mayor en un caballo blanco y explica como Nuncio fue el gran transformador clásico del toreo a caballo y marcó su época.
El segundo narrador, también un conocido rejoneador o cavaleiro portugués es Antonio Raul Brito Paez, gran domador de caballos de rejones y quien es de la misma época Pinto. Brito Paez también habla de Nuncio como un gran caballero y lidiador de acaballo que desarrolla lo que en Portugal se comprende como el toreo puro.
Luego habla de Mestre Batista como otro rejoneador que marcó una era en rejoneo de Portugal entre los años 50 y 70 mostrando una foto de cara y otra en blanco y negro yendo de frente al toro. Y luego habla de la era de Joao Moura a quien considera el otro gran innovador del toreo a caballo en Portugal, y quien triunfara en Madrid con solo 15 años en el famoso caballo Ferrolho domado por Nuncio.
Vemos luego varias fotografías de Moura padre muy joven, y el narrador expresa que Moura aporto al rejoneo el concepto de la ejecución perfecta de la suerte, de cómo se debe ejecutar la suerte y colocar un “ferro” o hierro, es decir una farpa que es el equivalente a un rejón en la lidia portuguesa o una banderilla a un toro y como convertir toda la lidia en una secuencia hilvanada con una expresión que le llegue mucho al público. Finalmente vemos a Pablo Hermoso de Mendoza en Portugal también ejecutando el rejoneo de frente y a la perfección, clavando en lo alto y luego llevando al toro templado o ceñido al galope del caballo y toreado con mucho arte.