Mateo Carreño y Bolívar se encuentran nuevamente
Mateo Carreño y Bolívar se encuentran nuevamente. Luis Bolívar ha tenido varios apoderados y por unas u otras circunstancias no ha cuajado ese hombre que le dé la trascendencia a nuestro buque insignia de la tauromaquia andante en Colombia.
Bolívar en el camino se hizo novillero en España, allí en Valencia matador de toros , hoy es feliz padre de familia y ha tenido una carrera vario pinta con triunfos y a veces incomprendido no le han querido valorar como aquella tarde de Madrid con un toro portugués de Palha.
«Ni caso» de esos volubles aficionados venteños. Pero Bolívar como lo demostró en Antequera en el mano a mano con Finito tiene metraje largo.
Bueno, tras el apoderamiento de Leandro y Álvarez Canorea, don Luis Alvarez, Dávila Miura… Llega a la casa del taurino salmantino estrechamente vinculado desde los tiempos de su padre con la Casa Chopera. De hecho maneja los entresijos de la plaza de Salamanca.
Pues decía un programa de una radio colombiana hace algunos años «buen viento y buena mar»… Éxitos para los dos
Los dos se conocen, saben cómo piensan, las inmensas posibilidades del vallecaucano en esta etapa de madurez del torero caleño deben florecer.
Mateo Carreño y Bolívar se encuentran nuevamente.