Morante no pasa por el quirófano ,no se va y prepara temporada
(la foto primera es la alternativa de Morante en Burgos con el maestro Rincón de padrino)
La noticia la trae don Antonio Lorca en El País y da las pistas del recorrido de Morante de la Puebla para el 2024.
Lo primero, no pasa por el quirófano.
El diestro José Antonio Morante de la Puebla no pasará finalmente por el quirófano para ser intervenido de la lesión que sufrió en su mano derecha, y ya ha finalizado el duro y largo proceso de rehabilitación al que lo ha sometido el equipo médico del club de fútbol Sporting de Lisboa en la capital portuguesa.
Los médicos que han atendido al torero han descartado que deba ser intervenido quirúrgicamente, y le han recomendado que no retome los entrenamientos hasta dentro de un mes o mes y medio, pero que incremente cada semana los ejercicios recomendados.
Esta decisión coincide con el deseo del torero, muy preocupado en un principio por los cuatro meses de recuperación a los que le hubiera obligado la intervención, sin certeza absoluta de la funcionalidad total en la muñeca y la inseguridad de comenzar la temporada próxima en plenitud de facultades físicas.
El torero sufría una rotura de fibrocartílago triangular y lesión del ligamento escafo-semilunar de la muñeca derecha a raíz de dos percances, el primero el 24 de junio en Badajoz, y, dos días más tarde, el segundo en la localidad portuguesa de Vila Franca de Xira. Estos contratiempos le obligaron a cancelar sus contratos en dos ocasiones, hasta la suspensión definitiva, que le impidió volver a Sevilla y no hacer el paseíllo en Valencia, Madrid y Zaragoza.
Desde el primer momento, se planteó la posibilidad de que Morante tuviera que pasar por el quirófano, y así se lo recomendaron los especialistas a los que acudió, hasta que la intervención del equipo médico del club de fútbol lisboeta cambió radicalmente los planes
Morante ya está de vuelta en La Puebla, donde el pasado sábado se probó ante una becerra en la plaza que posee en la hacienda donde vive, y ha mantenido un primer encuentro casual e informal con el empresario de La Maestranza, Ramón Valencia, en un bar cercano a la plaza sevillana.