Oreja de peso a Ritter en Avila con toros de Dolores Aguirre
La imagen de un feliz torero con su oreja ganada a ley es una cortesia captada de instagram de @toreoculto
Sebastian Ritter ha retomado el sendero del triunfo, cortó una oreja en Cebreros, Avila y de seguro vendrán nuevos compromisos en territorio español donde tomó su alternativa , soñada , con toros de Victoriano del Rio y de padrino «El Cid», nada menos que en la plaza de Las Ventas.
En el titular he puesto que de peso pues no se trata de un encierro cualquiera sino de toros de doña Dolores Aguirre de esos que las figuras » ni por asomo».
Así que cortar una oreja a un toro de esa divisa tiene un doble mérito.
Doña Dolores Aguirre adquirió la ganadería de bravo en 1977. Esta reata pasta en las 1.300 hectáreas de extensión, en la Dehesa Frías del Huéznar, entre las localidades sevillanas de Constantina y Lora del Río. La vacada procede del Conde de la Corte por partida doble. Pues en su día compró una punta de reses a Pilar Fernández Cobaleda y, otra, a su padre, Atanasio Fernández, las que padreó con los sementales, Ali y Tamaric, adquiridos al anterior aristócrata, en 1983. La propiedad del hierro procede de María Teresa Osborne. En la actualidad contaba con unas 120 vacas de vientre y 60 sementales.