Toros y Ciudad. Rivera acaricia la perfección, Morelli enamora, Manolo Castañeda ofrece el mejor y vibrante tercio de banderillas y dos grandes sustos con variado encierro de Miguel Gutierrez

Toros y Ciudad. Rivera acaricia la perfección, Morelli enamora, Manolo Castañeda ofrece el mejor y vibrante tercio de banderillas y dos grandes sustos con variado encierro de Miguel Gutierrez

Imagenes cortesía de los colegas fotógrafos Julian Velasco y Diego Alais

Comienzo por reseñar que Ricado Rivera y Juan Gómez Dinastía, novillero, volverán a Manizales en la feria de enero de 2023 al ser declarados triunfadores sin discusión, por mérito, y virtudes del ciclo número 23 de Toros y Ciudad. James Peña » Granerito» , MEJOR SUBALTERNO,. La ganadería de Mondoñedo declarada triunfadora justamente en el año de su debut en este certamen taurino que coincide con los fastos de la fundación de la ciudad.

La corrida de los seis colombianos comenzó con un paseillo de los toreros encabezados por a la postre triunfador, Ricardo Rivera. Recorrieron el anillo del ruedo para cerrar la jornada exultante de la marcha horas antes por las calles de Manizales. Una bandera tricolor y la palabra LIBERTAD escrita en la arena le dieron ese marco reivindicativo al festejo por el derecho al trabajo, a defender las tradiciones entre ellas, claro, el toreo que , mal que les pese a muchos, es cultura.

Por comportamiento este domingo , tarde soleada , más de tres cuartos en los tendidos, variado encierro de Miguel Gutierrez en la corrida de los seis colombianos en Toros y Ciudad en la que destacó Ricardo Rivera que con las yemas de los dedos rozó el cielo de la tauromaquia pues no se puede torear con mas temple, reposo, fondo, personalidad , mano baja, toreo hondo, de sentimiento, de arrobo por amos pitones y como » Mesias» que sustituyó al lesionado Zapatero embestía al ralenty, el vallecaucano perfumó la faena con cadencia y ritmo creando una verdadera sinfonía de toreo. Ricardo se abandonó, dejó fluir el alma, soñó el toreo y lo cristalizó en una tarde maravillosa para él, desde luego a los aficionados que gozaron en lo mas recóndito de su ser. Un torero para colocarlo hoy por hoy en lo alto del escalafón sentimental.

Una oreja dice poco de lo que ocurrió durante casi 20 minutos de la lidia con un gran toro, de nobleza monjil que este torero pudo aquilatar en toda su dimensión.

Al toro le dieron la vuelta al ruedo.

Luis Miguel Castrillón, fino torero de Medellín se encontró, digo, se estrelló con la mala suerte . El toro acobardado y buscando las tablas ofreció poco para nula cosecha. Lanzarote, mansón, huidizo, distraído, cara alta. Sin opciones.Dejó eso sí con el capote bellos lances como éste de la imagen. Ya con la muleta, no encontró compañero de viaje

Rocío MOrelli se fue a porta gaiola y se ganó el favor del público que de principio a fin coreaba «Rocio…Rocio…Rocio «.

Pasamos gran susto cuando el toro la golpeó, ella quedó tendida en la arena y el toro pasó por encima de su cuerpo sin tocarla …

Toro enrazado que no regaló nada y era preciso utilizar las adecuadas teclas al que la joven hija de Yuly » La Cordobesa » le plantó cara, toreó con gusto y emoción y la gente disfrutó con lances estupendos y de riesgo que supo controlar.

Dejó trazos con la muleta de mucho peso pero la suerte suprema no le acompañó y sonaron tres recados. La obligaron a salir al tercio a saludar.

Muy bien estuvo Sebastián Cáqueza que al final cortó una oreja, Faena variada, seria, con matices muy interesante por cómo planteó la lidia.

Manolo Castañeda nos hizo pasar angustias pues en tres oportunidades fue cogido,en una de ellas debió pasar a la enfermería de la que salió para terminar la lidia.

Cuando interpretaba un muletazo muy mexicano » la falda » el toro lo golpeó fuertemente.Momentos previos, con el capote, también fue achuchado por el toro Manolo vistió un grana y oro el traje de los valientes y a fe que hizo honor el bogotano a ese precioso vestido de luces.

Hacía mucho tiempo y lo destaco que no veía colocar tan bien tres pares de banderillas, dos de poder a poder, una parado en el estribo, y la del violín que tuvo grandeza. Dio una vuelta al ruedo , vuelta que repitió al finalizar la lidia.

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