Un parlamentario prohibicionista convoca velatón por los toros muertos, en la explanada de La Santamaría. Esa afrenta debe ser replicada educadamente para explicar nuestro ceremonial
El parlamentario Lozada fue taurino, él lo contó, pero ya no. Y creo que no entendió nada, jamás apreció ese hermoso ritual desde los tendidos. No es fácil ser taurino. Ese antiguo acto litúrgico no es para todo el mundo. O se entiende, se aprecia, se siente, se emociona o no.
Pues ha decidido ese velatón por los toros mientras la violencia sacude varias regiones entre ellas Cauca y el Valle del Cauca. Solo por citar dos regiones. Un ciudadano se salva de morir víctima del sicariato, parlamentarios cuestionados, reformas que pasan producto de presiones , pero al susodicho congresista solo se le ocurre el velatón por los toros bravos que dejan su aliento en la plaza en una épica batalla y no víctima de un matarife.
El tiene todo el derecho a no gustarle y denostar la tauromaquia que un día abrazo con su padre…Nosotros, los taurinos también tenemos el derecho a la replica, y a poner en cuestión este proceder.