Murió el intelectual Fernando Sánchez Dragó ilustrado defensor de la tauromaquia:» Las corridas son una forma de entender el mundo»
- El escritor Fernando Sánchez Dragó ha muerto a los 86 años
- El periodista ha sufrido un paro cardíaco en su residencia de Castilfrío de la Sierra, en Soria
- Esta misma mañana, el escritor compartía una fotografía suya en su cuenta de Twitter
El escritor Fernando Sánchez Dragó ha muerto a los 86 años de edad. El periodista ha sufrido un paro cardíaco en su residencia de Castilfrío de la Sierra, en Soria. Tras su muerte, las reacciones en redes sociales no se han hecho esperar.
Los primeros en asistir a Fernando Sánchez Dragó han sido sus vecinos.
Sánchez Dragó estaba pasando la Semana Santa en su refugio soriano. Allí disfrutó de unos días de «campo, conversación, literatura y amistad» con el escritor José Ángel González Sáenz, con quien dio un paseo por la Fuente del Suso de la localidad castellana. También tomó un aperitivo al sol «con Montse y Clara, amigas catalanas, la segunda fue, hace muchos años, mi editora en Planeta», explicó.
Antes de poner rumbo a Castilfrío de la Sierra, Sánchez Dragó apareció a finales de mes de marzo en el Congreso de los Diputados con motivo de la moción de censura de Vox. El escritor y periodista, que nunca ha ocultado su cercanía ideológica con la formación de Santiago Abascal, fue promotor del economista Ramón Tamames como candidato a la presidencia, una elección que se fraguó durante una comida en un restaurante, según explicó el escritor en laSexta. «A mí se me ocurrió proponer el nombre de Ramón Tamames porque era perfecto por su trayectoria personal, que es intachable, es profesor, economista, filósofo, escritor, sabe administrar, gestionar, y es un hombre de vigorosa personalidad y de escrupulosa honradez», defendió.
SU POSTURA EN DEFENSA DE LOS TOROS
«No comprendo cómo los ecologistas pueden estar en contra de un fenómeno gracias al cual se han salvado extensos territorios de la agresión industrial. El ecosistema de la dehesa sobrevive en buena medida gracias a la ganadería brava. No entiendo cómo se puede discutir la lidia desde un punto de vista ecológico cuando debido a ella, aunque indirectamente, se han salvado de la destrucción tantas dehesas y marismas», defendía.
«La taurofilia creció en mí por tres caminos paralelos. Primero, el contacto con el toro en los encierros. En segundo lugar, como espectador en las plazas. Y tercero, a través de la literatura. Yo, que siempre fui un niño letraherido, empecé a leer desde muy pequeño a Ernest Hemingway, Henri de Montherlant y otros grandes autores que han escrito sobre la lidia. Quedé tan cautivado por ellos que llegué a pensar, cuando era adolescente, que para ser un gran escritor había que ser aficionado a la fiesta. Y en la medida en que Hemingway o Montherlant eran para mí escritores modélicos, yo los imitaba», añadía.
Así recordaba ABC la relación de Sánchez Dragó con la tauromaquia
El escritor y periodista Fernando Sánchez Dragó (Madrid, 1936)lleva más de medio siglo yendo a corridas, siendo amigo de toreros, y escribiendo libros y artículos sobre toros. Pronunció en el teatro Lope de Vega el pregón con el que se inicia la temporada taurina. Aunque la polémica siempre acompañada a este periodista -que ha recibido los premios nacional de Literatura, Planeta y premio Fernando Lara-, asegura que «el mayor honor que la vida me ha concedido es ser pregonero de la Real Maestranza de Sevilla. Yo hice un pregón discreto, amistoso, honrado, sincero y a veces gracioso para no aburrir al respetable. No meteré ninguna idea provocadora, ni se me ocurre».
Frente a los llamados «animalistas», Sánchez Dragó defiende las corridas de toros «porque son, como dijo Lorca, la fiesta más culta de la tierra y no sólo estética, que eso no lo discuten ni los más acérrimos antitaurino, sino también ética porque es una escuela de vida, de decoro, de valor, de dignidad, de lealtad, de compañerismo y de amor a los animales. Una segunda razón para defenderlas es la defensa del ecosistema, ya que gracias a la existencia de los toros se han salvado las dehesas, que son extensos terrenos que se han visto a salvo de la agresión industrial, turística, de los campos de golf, de los centros comerciales, de los hoteles de cinco estrellas… En tercer lugar, la corrida de toros es un homenaje al animal más hermoso que existe sobre la tierra y al cual se le brinda la posibilidad de morir como un guerrero y no de forma humillante en el matadero.
Asegura el escritor que «los antitaurinos desprecian cuanto ignoran. Raro es el antitaurino que ha visto una sola corrida de toros. En segundo lugar, el toro de lidia procede del uro, que se extingue en los años 30 en los bosques de Polonia porque no tenía ninguna utilidad doméstica. El toro de lidia no tiene utilidad doméstica y se habría extinguido si no fuera por las corridas. Ha habido toros de lidia desde la noche de los tiempos. El rey visigodo Sisebuto tuvo que ser reprendido por un obispo por su desmedida afición a los toros. Lo único eterno que queda de la España profunda son los toros. En cuanto a lo que dicen de un animal indefenso, el toro es el animal más poderoso que existe y antiguamente se enfrentaban toros a leones y elefantes, y siempre ganaba el toro».
Sobre la irrupción de Podemos en el panorama político y la importancia que pueda adquirir en la política de pactos a nivel nacional y autonómico, así como su influencia en la Fiesta Nacional, opina que «no creo que vaya a gobernar nunca. Diga lo que diga Zapatero, Podemos es un partido populista, como lo ha sido Beppe Grillo en Italia. Los partidos populistas son anecdóticos e irrumpen en el panorama nacional y después poco a poco van desapareciendo. Podemos ha pedido también hacer un referéndum sobre la Semana Santa y yo digo que muy bien, que lo hagan. Ya verán el bofetón que se llevan. Como se llevó un bofetón mi amigo Leguina cuando pretendió quitar la fiesta de los Reyes Magos y la gente casi se echa a la calle. Que Podemos toque la Semana Santa en Andalucía y ya verán cuantos votos sacan. La Semana Santa, los toros y el cante jondo lo han hecho el pueblo y eso no hay político que lo toque y si algún partido quiere tocarlo, se estrellará».
En lo que respecta a la retransmisión por televisión, en directo o diferido, de corridas de toros, Sánchez Dragó es taxativo: «Yo, que soy capaz de recorrer 2.000 kilómetros para ver una corrida, no veo toros por televisión porque son una falsificación. Para ver las corridas de toros hay que ir a las plazas. Tu colocas un primer plano de un torero dando un natural a ralentí y lo estás falsificando. Por eso, yo entiendo perfectamente a José Tomás cuando prohíbe que se retransmitan sus corridas».
En cuanto al vacío que a menudo puede verse en las plazas de toros, admite que «los carteles influye, claro. Por otra parte, hay una presión mediática contra las corridas de toros que no se corresponde con la realidad y eso influye en la gente también. ¿Son caras las entradas a los toros? Pues no. A mí me parece más caro ir a una discoteca y pedir un güisqui. Si te vas a barrera, de sombra en un día de tarde grande, pues es posible que sea caro, pero entonces no te vayas a barrera sino a grada, como he ido yo toda mi vida hasta que he tenido posibles».
Critica además el hecho de que el Tribunal Constitucional lleve cuatro años sin resolver el recurso contra la prohibición de las corridas de toros en Cataluña. «Justicia tardía, justicia baldía. Y eso es algo que se aplica al TC, que tendría que haber emitido ya una sentencia contraria a la prohibición de los toros porque un político no tiene potestad ni un Parlamento para prohibir las corridas de toros. Mientras haya espectadores dispuestos a pagar tendrá que haber corridas de toros. Lo que se ha producido en Cataluña es simplemente un abuso de poder».