( En la imagen flanqueados por el torero Nelson Segura y el ganadero Ricardo Arandia, el torero Gitanillo de América y el ganadero Juan Carlos García esplendido anfitrión en un maravilloso día de campo ).

( La galería es autoría del jefe de fotografía de este portal, FARLEY BETANCOURT)

Frente a la arremetida prohibicionista cuyos autores desconocen lo que pretenden eliminar, al toro bravo, que dicen defender acabando las corridas y de paso arrasar una especie única, el toro bravo, un grupo de representantes visitó Vistahermosa, recorrieron en un tractor la ganadería, observaron al toro bravo en su habitat, el exquisito trato a este que es un ser único y admitieron que lo que les ha contado ese sector de fanáticos dista y mucho de la realidad.

Los legisladores tuvieron tres ganaderos como cicerones: el anfitrión, Juan Carlos García, tercera generación de una familia dedicada a la crianza del toro, a Gonzalo Sanz de Santamaría, cuarta generación de la dehesa mas antigua de Colombia, Mondoñedo que el año próximo cumplirá 100 años y al maestro César Rincón, una de las figuras míticas del toreo contemporáneo y ganadero.

Pudieron ver cómo el instinto del toro bravo está presente de manera diamantina, cómo se arrancan desde lejos ante los visitantes extraños que les saludan.

Los tres contaron a los ilustres visitantes el modo, forma y el cómo de la vida de un toro bravo en el campo, el cuidado supremo que se le dispensa, la armonía de muchas especies de plantas y animales en esos paraísos de naturaleza casi virgen y que si las corridas se acaban serán arrasados por los urbanizadores en esa voracidad inclemente del pico y pala sumado al desempleo de familias que hoy gozan de un digno sustento al servicio de esas ganaderías.

Hubo tiempo para las anécdotas, se recordó a Manolete, a ese ícono de las ganaderías españolas que es Miura , las 4 puertas grandes por LAS VENTAS de Madrid del maestro Rincón, la relación del toreo con el flamenco, con la arquitectura ( esos trazos mozarabes de la plaza De Santamaría en Bogotá ), con la literatura, la novela, la poesía, la escultura mientras caía un aguacero inclemente que no amedrentó a los gozosos visitantes que pudieron contemplar arrobados esa gigantesca peña que es vigía en la ganadería en medio de un estallido de colores que tachonan ese campo sagrado del toro, rey de una fiesta milenaria.

Hubo espacio para un tentadero en el que participaron con acierto , arte y gusto el veterano Gitanillo de América,de quien se puede decir que » el que tuvo retuvo» por su técnica y sapiencia en las artes de la lidia tras mas de un cuarto de siglo como torero profesional, Luis Miguel Castrillón, fino torero antioqueño de temple y armonía, y el joven Manolo CASTAÑEDA el mas reciente alternativado de la tropilla andante de toreros, y los novilleros con esa pasión de quien asume como rito su profesión»El Pecas» que » pegó» unas tandas muy armoniosas, Andrés Paloma que hace unos días en el Congreso exclamó : los sueños no se negocian y a fe que lo conseguirá por su bien hacer, David PACHECO, serio y elegante y Felipe Miguel Negret que va puliendo lentamente su personalidad.

No me olvido de un novillo excelente, bravo, noble, repetidor que echaba ese morro abajo, fijeza, durabilidad ( mas de 200 muletazos entre los toreros y novilleros ) y templanza en las embestidas, de nombre » Piel de plata «, hijo del semental «Mercenario».

La tarde campera cerró con rejoneo para mostrar otra rama de la tauromaquia luciendo José Luis sus jacas y mostrando esa diversidad del toreo.

Ojalá esos congresistas que estuvieron en el campo bravo puedan contarle a sus colegas lo que sus ojos admiraron donde vive, nace y crece el toro bravo

Galeria de fotos por FARLEY BETANCOURT