Una señora corrida de Juan Pedro Domecq. De unas hechuras excepcionales y que embistió como embisten los toros bravos y con clase. Muy buenos los dos primeros que tuvieron un fondo tremendo y bueno el tercero que desarrolló mucha nobleza y mucho compás, que en el toreo es calidad y entrega. El cuarto, indultado por Daniel Luque fue sobresaliente de todo; Muy bravo; El quinto resultó extraordinario.

La eclosión de la tarde llegó en el quinto

Cumbre de Daniel Luque que indulta a toro Rencoroso de Juan Pedro Domecq. Inconmensurable faena frente a un toro bravo que ha embestido con una clase excepcional. Luque ralentizó su embestida, con capote y muleta. Series largas, encajadas, a cámara lenta y el toro embistiendo con todo por abajo . Excelsa faena, una obra histórica.

La plaza se volcó en un torrente de sensaciones. Se pidió el indulto, perdonar la vida a la bravura que da la vida, mientras Luque en una moneda toreaba con el alma . Un torrente de inspiración. Un festín. Grandioso todo. 2 orejas y rabo simbólicos

Un gran Daniel Luque abrió la tarde en Burgos. Torero talentoso y en estado de gracia que entendió a la perfección la embestida del primero de Juan Pedro, al que potencio sus virtudes con mando de seda y un temple arrebatador. Una serie de naturales fue sensacional.

Revestida la faena de una naturalidad y de una entrega formidable. Los naturales fueron soberbios, la expresión, la manera de entender al animal. Una muñeca que reúne conocimiento y madurez. Gran estocada. Dos orejas. Faena grande

En segundo lugar un gran toro de Juan Pedro y una importante faena de Emilio De Justo que toreó con ligazon, intensidad y regusto en un palmo de terreno. Repitió el toro la embestida y el extremeño le llevo cosido con gran expresión. Una faena cargada de matices. Toro bravo.

Profundidad de Emilio de Justo que tumbó al toro de una estocada soberbia. Dos orejas

Noble el tercero al que toreó con muletazos de terciopelo Pablo Aguado en una faena cargada de clásico acento, de suculento manejo y de sabor. Al natural unas veces. 

En redondo, otras. Faena exquisita y de sobresaliente compás. A gusto Pablo Aguado que relació por su natural sentido del temple. Oreja

Gran toro el quinto, de un fondo extraordinario y una faena redonda y reunida de Emilio de Justo que toreó de manera sensacional sobre ambas manos, en una labor de mucha cadencia y de gran expresión. 

Entrega del torero frente a un toro de nota. A gusto el extremeño que ligó muletazos sobre ambas manos de muleta baja y rastrera. Gran estocada. Dos orejas y vuelta al ruedo al toro.

Pablo Aguado guionizo con prestancia y personalidad al sexto, otro toro de buena embestida al que toreó despacio en una faena elegante y sabrosa. Se gustó Pablo Aguado. Cortó una oreja y cerró una tarde para el recuerdo de la Tauromaquia en esta tierra

( Información gentileza del Correo de Burgos )