Autor: Guillermo Rodríguez

De la Viña hace un año volvió a vivir

Mariano de la Viña sufrió hace un año sufrió un cornalón en la feria del Pilar de Zaragoza. Aun no está bien y debe esperar para restablecer la movilidad de la pierna izquierda pero como TORERO (conoció de novillero a Enrique Ponce y desde entonces está en su cuadrilla) no ceja en el empeño de ponerse el traje de plata.

“Hasta que no pueda mover el pie izquierdo va a ser imposible. Yo no renuncio. El tiempo dirá si puedo o no, pero tendré que aceptar lo que venga. Me dolería mucho irme así de una profesión que ha sido mi vida. Haré lo posible y lo imposible para volver a torear”,

ha expresado Mariano de la viña, que no se acuerda de nada de lo que pasó aquella tarde zaragozana.

Su maestro, Enrique Ponce ha escrito en twiter un ello mensaje:

 “Hoy hace un año…!!! Hermano querido y aún me retumban en la cabeza esas imágenes que jamas volví ni volveré a ver, gracias a Dios hoy celebramos este día como un triunfo a la vida todos los que te queremos!. Eres un ejemplo de superación, fortaleza, torería, hombría, y tantas virtudes en tu calidad humana que sería imposible enumerar!!! Te echo mucho de menos en la plaza pero SIEMPRE estás conmigo! Y antes de salir el toro, los dos en el burladero, escucho tu voz…” vamos p´alante que estamos sin tabaco” Te quiero hermano del alma!!!

Gusto y sabor con Morante y Ortega que eternizan el toreo en Córdoba

«Seminarista», toro de finas hechuras, serio, armado de pitones, abrió la esperada tarde la hispanidad en Córdoba con un Morante queriendo siempre y partió sin cortar apéndices.

Pero dejando un sabor exquisito y la confirmación de que con Juan Ortega estamos ante un torero de mucha calidad y clase, de clásico estilo y acusada personalidad.

Tampoco saboreó el paseo de los apéndices pero sí del agradecimiento del público que llenó la plaza en las condiciones que impusieron las autoridades por la pandemia.

Mano a mano con el maestro de La Puebla.

El primero, sosote, deslucido, no le dio opciones y solo en una tanda al final se pudo apreciar la dimensión del de La Puebla en apenas destellos. Como suele decirse en Colombia, «todo era pinta (en el toro) y nada mas… La espada hizo guardia y luego puso punto y final con el descabello.

Juan Ortega lidia a «Programador » también de Jandilla como el primero que sale suelto,.

Bonita la media para dejar colocado al toro en su segundo encuentro con la cabalgadura… Y Morante puso su sello con dos verónicas y una media en el quite, media antológica.

Y ortega replica: Otra media de ensueño.

Brindis de elegancia, compañerismo en el marco de la rivalidad del mano a mano, de Ortega a Morante.

El toro tiene tendencia a los adentros y escarba. Ortega lo saca más allá de la segunda raya. Y en esa zona, más cerca de los medios, el toro embiste mejor.

Dos derechazos estéticos y encajados y una trinchera de esas de cartel de Diego Ramos.

El toro vuelve al lugar donde se encuentra más cómodo: los adentros y ahí Ortega «pintó» el toreo con majeza que salpicó con el forzado.

Es mejor el pitón derecho por donde se ha acomodado el sevillano que ha toreado con temple , naturalidad y verdad. Y ese detalle de cómo coge el palillo que sostiene la muleta , con la yema de los dedos, y suavecito.

La faena no ha tenido, digamos, la continuidad que tuvo aquella de Finito al toro de García Jiménez en Antequera pero la colocación, cómo se lo pasa de cerca, como se ciñe y el gran gusto de Ortega el torero » sensación».

Espada baja. Ovación.

Ortega expresó: No ha habido ligazón pero el toro tuvo buen son, galope y dejaba mecerse con él. El toro cogía los vuelos por abajo y por eso he disfrutado. Me gusta la rivalidad y que ésta se justifique mas allá de mi respeto por el maestro Morante, señaló Ortega a David Casas .

«Siete Gatos», el segundo de Morante. (Jandilla)

Mas detalles de Morante al dejar el toro en la jurisdicción de su picador Cristóbal Cruz en Córdoba.

Brinda a la parlamentaria Cayetana Alvarez de Toledo.

Queriendo, imponiéndose a las condiciones del toro con arte y valor, Morante ha mostrado esa faceta de querer y poder en series en las que le ha podido al toro que jamás ha estado metido en la muleta. Y dos ayudados por alto con sabor antiguo. De categoría. Y no hubo continuidad en el trasteo de Morante por cómo se lo planteó el toro.

Pinchazo rebotado y entera.

Sale «Japonés» con la divisa de Vegahermosa para Ortega.

El toro con violencia en sus acometidas. Y en mas de una ocasión ha puesto en aprietos a Ortega al punto que lo desarmó en una de ellas.

Toro que «reponía» y se guardaba aquello que decía el maestro Antoñete «se hace el haripendi»… Pegaba el típico arreón del manso y no la clara embestida.

Poco más, un macheteo suave y a coger «la espada de verdad».

Vuelve Jandilla con «Sarao» para el cierre de Morante en ese mano a mano en la plaza «Los Califas».

Dos grandes puyazos de Aurelio Cruz que es ovacionado y un quite por chicuelinas de mano baja de Morante. Responde Ortega de la misma guisa. Ovación.

Torea con esa personalidad única el de La Puebla. Muletazos por abajo, tanda por la derecha y con el de pecho mientras suena «Suspiros de España» del jienense Antonio Álvarez Alonso, creador del silgo XIX. .

Buen toro, a secas sin mayor explosión en sus embestidas. Se deja mucho. Naturales de factura girando los talones y el forzado. Magistral, barriendo los lomos del toro para rematar las series.

Un Morante en estado de gracia, de disposición, de vocación, de responsabilidad en una corrida que justifica el mano a mano en Córdoba.

Es quizás el mejor de los tres para Morante con una variedad de toreo, cómo se salió con el toro a los medios, las verónicas, las chicuelinas, las medias, los forzados, el de pecho, los naturales, las trincherillas, los ayudados por alto y por bajo…

Y como no podía ser menos en la tierra de Manolete, pues tres manoletinas con el sello morantiano y un público puesto en pie. Tres ayudados por alto y abaniqueo por la cara.

Pinchazo hondo en buen sitio y media. Aviso y el toro dobla. Ovacionado en la vuelta al ruedo.

«Ha sido una tarde especial, el público está disfrutando y ha seguido la corrida con respeto e interés y yo me expresado con lo mejor disposición y si bien el conjunto ha sido bueno, con la espada, he estado poco acertado pro eso sí «arrebujao en todo momento», le dijo Morante al Canal Movistar.

«Osorio», de Jandilla , serio, cuajado, el único castaño del encierro para cerrar plaza en Córdoba con Ortega.

La verónicas han tenido majeza, al final el toro sale desentendido y él le da esa media como queriendo decir «ahí queda eso».

Fue lo mejor pues luego el toro a menos, muy deslucido, abrevia y espada baja y desprendida. Arreón y huida del toro en Córdoba.

Ligia Henao de Betancourt, madre de nuestro compañero de tareas, Farley, ha partido al encuentro de la gloria eterna.

La madre de nuestro querido compañero de viaje en esta aventura de la información taurina, director de fotografía y vídeo, Farley Betancourt, ha partido al encuentro con el altísimo tras dejar un amoroso paso por la tierra.

La tristeza invade este portal.

Doña Ligia Henao de Betancourt miró la vida esperanzada.

Llenó de amor y ternura su hogar en una casa donde el trabajo, la disciplina y la pasión por Colombia son las señas de identidad.

Siempre abrigamos la esperanza de que esos seres de luz nos acompañen «toda la vida» pero las fatigas del cuerpo van minando no el alma pero sí el motor que nos permite estar en este mundo.

La muerte es la única certeza; no sabemos cuándo ni cómo pero ese tránsito es riguroso y debemos admitir humildemente su «presencia» mientras peregrinamos aquí esperando la llegada de la gloria eterna cuando seamos apenas polvo y cenizas.

Doña Ligia, modélica dama, jamás se quejó de las fatigas de esta nación, de las lógicas perturbaciones en este camino terrenal y procuró con su ejemplo que los suyos disfrutaran de un pasar digno, que fueran personas justas y educadas en su quehacer cotidiano que se constituye en don preciado.

La mañana de este domingo la despidieron en Bogotá en la funeraria «La Candelaria» de El Chicó.

Las exequias a las dos de la tarde en la iglesia Santa María Goretti, en La Castellana y el sepelio en Jardínes del Recuerdo, en la Autopista Norte con calle 205.

Farley sabe que escribir estas líneas es doloroso para quienes gozamos de su talante y de su amistad pues conocemos la profunda tristeza que lo invade.

A él, a sus hermanos Aleida, Jairo, Doris, Jorge; al padre, don Heliodoro, las condolencias y el ruego al creador que les dé paz y serenidad en estas horas.

El ejemplo que deja en ese hogar doña Ligia que sea el consuelo para seguir en este tránsito efímero en la tierra.

Doña Ligia no morirá mientras haya un ser que la recuerde. “Dios nos dio memoria para nunca olvidar a quien amamos”, reza un proverbio árabe.

Broche de oro en el cierre de «Toros y Ciudad». C. Pardo, la única oreja, un gran toro, el cuarto y la prístina belleza del toreo de D. MARTÍNEZ y Libardo

La plasticidad del toreo puro de Manuel Libardo

Broche de oro en el cierre de «Toros y Ciudad». Una corrida de Ernesto Gutierrez, variada, en tipo «de la casa», algunos con la complejidad de la bravura que debe ser resuelta, el último se paró, y un par de toros con muchas opciones.

El primero y el quinto, toreros con ganas, belleza en los trazos de Libardo y Martinez, oficio a raudales de «Perla» y esa regularidad de Cristóbal Pardo que cortó la única oreja de la tarde.

Muy bien las cuadrillas con un excepcional Ricardo Santana, en varas eficaces y medidos Clovis, Ospina y Cayetano.

Un brindis sentido y merecido de David al dr Juan Carlos Gómez que echó «p’alante» Toros y Ciudad en su vigésima primera edición y de Manotas, Cristóbal y Perla a Manizales, ciudad que hizo las ferias taurinas en Colombia desde 1955.

Notable este toro cuarto…Como embiste con el morro abajo y ese gran pitón izquierdo por donde lo bordó C. Manotas

Un gran toro el cuarto, con diferencia, ese ejemplar con el que MANOTAS BATALLÓ CON HONDURA y «peleó» en sus posibilidades con esa bravura que nos recordó aquello de «que te salga un toro bravo».

Y el gitano replicó: que no salga… Un toro importante con su juego correoso, por «incordiar», por molestar al torero como pedía el maestro Andrés Vazquez que dice.

El toro no está para complacer.

Ese prodigio de mezclar dos encastes, el Murube (clase) y lo picante y bravo del Santa Coloma que va para la tercera generación, se vio en sus distintas facetas en la plaza monumental.

El oficio, la técnica, esa estampa de toreo antiguo, el clásico, el eterno

Destaco el oficio, la sobriedad, los largos años de alternativa de Guillermo Perla Ruiz que con serenidad sorteó lo que el toro le planteaba.

Tuvo que sacar ese oficio y técnica y es de esas faenas para buenos aficionados donde no hay florituras ni concesiones al barroquismo.

Le dieron la vuelta al ruedo al toro.

Me recordaba «Perla» aquello de que cuando un torero deja de torear se muere y él no quiere morir y por eso mantiene la misma ilusión como cuando empezó hace mas de 30 años en la plaza de «El Soldado» a querer ser torero.

Cristóbal PARDO ANDUVO SOLVENTE, con gracia torera en esas trincherillas y el forzado de pecho y en un trasteo que evidenció el respeto por la profesión y como un torero de su trayectoria es capa de honrar el traje de luces.

Un placer admirar esa torería de un joven y maduro espada que la postre le recompensó con la única oreja del festejo.

Manuel Libardo torea preciosamente y es casi redundar en los sabido pero cómo olvidar esas obras efímeras de arte con el capote y luego con la muleta, con la distancia, la colocación.

Esas pequeñas joyas que eternizan una tarde… Tener toreros como Libardo con esa cadencia es un lujo pero la espada «no respondió» y todo quedó en palmas…

Manotas es cartagenero.

Tras la alternativa en Cali lo abandonaron pero él jamás se dejó impresionar por la displicencia de «los otros» y Manizales le ha vuelto a llamar.

Se encontró con un toro importante que tenía como se expresa ahora, «muchas teclas» por tocar porque fue bravo y honró la divisa oro y luto.

Y nos ilusionó esa variada e importante faena con el capote.

NO se arredró con los apuros que pasaron en banderillas Giraldo y Devía y con esas embestidas serias y «temerarias» pero el epílogo no fue el mas acertado.

Claro, la bravura es complicada, claro que sí y el bravío, cartagenero sabrá justipreciar el curso de la lidia con «CATEDRÁTICO» cuando ya despojado del traje de luces vea en repitición su encastado juego.

El toreo es arte y este muletazo es la mejor expresión de la grandeza del toreo como manifestación artística

David MARTÍNEZ ha salido «entonado» desde el capote, lanceando con evidente técnica adosada de belleza, alargando las telas y dejando «sabor» con ese remate de la media.

Metía la cara el toro con clase y disfrutando con lo que hacía en la faena, el torero de Cali de orígenes bogotanos tuvo enormes cotas de calidad, había gracia, donaire y torería en lo que hacía.

Pero «la tizona» no tiene palabra de honor y no pudo abrochar un triunfo que lo tenía en el esportón… Lo bello y bueno no se olvida y yo tampoco.

El menos placeado, El Choni topó con un toro fino de hechuras, armado, cuajado que no terminó.

Nos defraudó su juego por sus hechuras y el chico que poco torea lo intentó sin suerte. Tenemos que esperarlo, goza de crédito aun y con enormes posibilidades con más corridas. A los toreros hay que darles opciones y no arrumarlos.

Broche de oro en el cierre de «Toros y Ciudad».

Abre «Canastero» y cierra «Pereirano» de Gutiérrez en «Toros y Ciudad» en Manizales

La corrida de don Miguel Gutiérrez ya está entorilada en la plaza de Manizales para el festejo de cierre de «Toros y Ciudad» que ayer vivió una apasionante novillada, descubrimientos y con mucha sinceridad la aspiración de que hay una generación de relevo que paulatinamente se irá macerando a fuego lento.

Hoy en Manizales

El veterano Guillermo Perla Ruiz ABRE EL FESTEJO QUE SERÁ VIRTUAL y por la estación de televisión TELECAFÉ y cierra el sogamoseño Leonardo Campos «El Choni».

¿Quieren verlo por otro medio distinto a Telecafé, por la razón que sea? Conéctense vía: #TorosyCiudad2020 – Fanpage de Facebook Plaza de toros de Manizales, y acomódense.

Comenzará a las 3 de la tarde, hora colombiana, 10 de la noche de Europa Central, 3 y media de Venezuela, y México, Ecuador y Perú el mismo horario colombiano.

SORTEO

Con todas las medidas sanitarias, fijación de distancias, uso de tapabocas se cumplió el ritual del sorteo.

1,. «Canastero » 518 kilos para Perla Ruiz

2.-GlADIADOR , con 494 kilos para el caldense Cristobal Pardo

3.-«Zapatista » con 448 kilos paraManuel Libardo

4.-«Catedrático» con 488 kilos para el cartagenero César Manotas

5.- «Tonelero» con 458 kilos para David MARTÍNEZ y se cierra la corrida

con el 6.- » Pereirano» para Leonardo Campos «El Choni»

La ilusión de los novilleros en «Toros y Ciudad» en Manizales

La ilusión de los novilleros en «Toros y Ciudad». Manizales derrotó los peores augurios, y virtualmente ofreció el primero de los dos festejos de la 21 edición de «Toros y Ciudad» con gratísimas sorpresas en el escalafón de novilleros con y sin caballo y el germen de un rejoneador, Juan Simón formado en la Escuela de Juan Rafael Restrepo.

Gracias a Juan Carlos Gómez, a la junta directiva de Cormanizales, a la Cruz Roja, a los ganaderos, a los novilleros, a las cuadrillas de picadores y banderilleros, al personal de plaza, a César Camacho, a Cristóbal Pardo, a Luis Miguel Castrillón, a TELECAFÉ , a los mozos de espada, y a todos los que hicieron posible conquistar la libertad de reunirnos pacíficamente y cumpliendo todas las normas sanitarias para festejar nuestro derecho a vivir la fiesta.

Simón Hoyos, aficionado práctico, universitario, empresario mostró naturalidad, condiciones, colocación, sentido de la lidia, trazos de gusto, variedad en su quehacer y Negret que encandiló en una plaza vacía por órdenes gubernamentales por la pandemia con su frescura, valor, ganas, intuición, manejo de las telas y todo un mundo por conquistar.

«Me emocionó cuando al final por fallar con la espada me dijo: Soy un privilegiado pero yo lo que quiero y amo a mas de mi familia es ser torero y por eso entregó la vida como me la ha dado el Eral que me correspondió».

Esto es lo que quiero ser, afirmó sin titubear el espigado estudiante de derecho que más allá de su ilustre apellido, de su encopetado padre, defensor de la tauromaquia y creador de la Ley 916 que protege la fiesta en Colombia.

Puso sobre el tapete esas «ansias de novillero» cantadas por el maestro Lara.

Hubo esa apasionada entrega de la que habla el escritor pepe Alameda, inocente y racional en este proyecto de torero que estrenó.

Montera en mano, su primer vestido de torear, de quien quiere ser figura no por el apellido sino por sus méritos, su dedicación y esa esperanza que nace en un ritual necesitado de renovación del escalafón.

Y esa declaración de sanas intenciones de Felipe Miguel se exhibió al echar de rodillas para una electrizante larga cambiada y luego de hinojos y ganando terreno, torear con la muleta en la mano derecha hacia los medios.

Que le faltan «cosas», claro pero la tarjeta de visita es halagueña y esperamos nuevas ocasiones para verle.

Estos dos ilusionantes novilleros demuestran que el toreo no pertenece a ningún partido, y que ser torero nada tiene que ver con el poco dinero o una situación económica holgada.

Esa pasión por torear es a otro nivel, el de las emociones y los sentimientos.

Los novillos de Gutierrez, los que se picaron y los que no (sin caballos), se dejaron mucho en mayor o menor medida, nobleza tuvieron.

Alguno pecó de falta de fuerza, otro duró poco, y un par buscaron al final los adentros pero en general fue una novillada que cumplió.

A uno se le dio el honor de la vuelta al ruedo y los chicos no pasaron angustias.

Como expresó con desbordante verdad uno de ellos «tenemos que aprender mucho», corregir mucho y entrenar mucho mas…

No es que los cuatro restantes hayan estado fatales pero esas carencias se notan en la colocación, en no medir las faenas, en no cruzarse, en ahogar algún novillo que pedía distancia, en el uso de los aceros, en el manejo del capote y en varios desarmes evitables. La ilusión de los novilleros en «Toros y Ciudad».

Juan Simón «pinta» para rejoneador.

Tiene una afición a toda prueba y combina sus estudios en el Liceo francés con montar a caballo, manejar las cabalgaduras y colocar los palos…

Sus padres, abogados los dos, le han dado todo el cariño, comprensión y aliento a un niño que a tierna edad proclamó su gusto por el mundo del caballo y el toro.

«Que cumpla sus sueños es nuestra mejor recompensa», señaló a Tendido7 su madre. Va en el buen camino gracias a esos progenitores y a un maestro como Juan Rafael.

TELECAFÉ transmite «Toros y Ciudad» este sábado y domingo

TELECAFÉ la emisora de televisión que nació como respuesta a las necesidades del llamado eje cafetero.

Sus aspiraciones, sus gentes, sus artistas, su geografía, su cultura, sus laboriosos cafeteros, los empresarios, los trabajadores, los artesanos, los estudiantes, los profesores, los intelectuales.

Emitirá los dos festejos de hoy sábado y mañana domingo de Toros y Ciudad, a partir de las 3 de la tarde, hora colombiana.

Se suma este Canal que hoy lo gerencia una ejecutiva del Quindío, Sandra Bibiana Aristizábal.

Así que además de los canales de Cormanizales, se podrá ver tanto la novillada mixta como la corrida de toros en señal abierta.

¿Quieren verlo por otro medio distinto a Telecafé, por la razón que sea? Conéctense vía: #TorosyCiudad2020Fanpage de Facebook Plaza de toros de Manizales, y acomódense.

Comenzará a las 3 de la tarde, hora colombiana, 10 de la noche de Europa Central, 3 y media de Venezuela, y México, Ecuador y Perú el mismo horario colombiano.

El viacrucis de Juan David Manjarrés que tocó el umbral de la muerte y hoy, con los pies en la tierra, sueña con ser un grande en el toreo

Juan David Manjarrés, sin exageraciones, salió del túnel, creyó que se moría, padeció lo indecible, persistió, se tomó los medicamentos, se hizo ver de varios médicos, se sometió a varias endoscopias hasta que al analizar la helicobacter pylori le dio positivo.

Helicobacter Pylori es una bacteria que coloniza el estómago, y es la culpable en un gran porcentaje de las úlceras pépticas.

Alrededor de un 50% de la población mundial lo padece y puede estar subdiagnosticado.

A la fecha no se conoce el mecanismo exacto a través del cual el Helicobacter genera un proceso infeccioso.

Lo que sí se sabe es que esta indeseable y peligrosa bacteria puede transmitirse entre una persona y otra por contacto directo con saliva, vómito o materia fecal.

También el H. Pylori puede transmitirse a través de alimentos o agua contaminada.

Juan David Manjarrés pensó que el tratamiento sería algo sencillo y se encontró con una muralla, pues en 10 días debía ingerir 140 pastillas… Un calvario.

Quien me relata este viacrucis es el joven novillero vallecaucano Juan David Manjarrés, postrado en una cama, noches sin dormir, llorando, pidiéndole a Dios que mejor se acordara de él para que cesara ese sufrimiento.

El Dios en que este aspirante a torero cree le dio el alivio… HACE UNAS HORAS ha vuelto a la vida, ha conciliado el sueño, tiene nuevas ilusiones y prefiere volver a Colombia para pasar una temporada.

Aliviar las angustias, quitarse ese peso de encima, que son los dolores del cuerpo y del alma, reanimarse en este país que le vio nacer y crecer para retornar a España el próximo año y cumplir el sueño que de niño fue amasando como se acarician todos los sueños a esa edad: ser matador de toros, en su caso.

«Retornaré a España y al toreo a lo grande, quiero ir a Las Ventas y decir con capote, muleta y espada quién soy pues tengo mucha fe en mis posibilidades».

Según me han dicho mis mentores aquí, en España, don Luis Alvarez y ese forjador de disciplina el gran Currito Alvarez, modelo de disciplina y saber pues el toreo es arete pero también físico, disciplina, fervor, sacrificio y humildad y esos atributos los atesora este joven novillero colombiano que volvió del frío.

Finito, poesía pura en Antequera con un Bolívar entonado y clásico pero sin suerte.

El toro, con el morro abajo, el pitón derecho «barriendo» la arena y Finito, perfectamente colocado en este derechazo de mando y señorío

El toreo es poesía pura y cuando los duendes bajan para acariciar el toreo se produce esa relación que solo la belleza del arte es capaz de hacernos sobrecoger, asombrarnos por lo que de espiritual comporta.

Eso fue lo que ocurrió esta soleada tarde de viernes con Juan Serrano «Finito de Córdoba» que unió muñecas, cintura y brazos para encumbrar al territorio ignoto de la utopía eso que nosotros insistimos con razones profundas en llamar ARTE (con mayúsculas).

Grandiosa tarde de toros del «Fino» desde el capote, y esos pases de la firma, las trincheras, los forzados, el toreo a dos manos y cómo inicia las tandas, los ayudados por alto y cómo sale de la cara del toro, con qué majeza.

Estoy seguro que si mi amigo Diego Ramos hubiera estado en Antequera, como lo haría el formidable Roberto Domingo, los dos dejan la historia de la tarde histórica para el toreo: Sin duda.

Porque fueron pinturas efímeras las que plasmó en el ruedo de Antequera tanto Fino como Bolívar.

Especialmente en su primerio, pinturas extraordinarias de esta tarde tan única y tan genial del torero Balear-cordobés y del vallecaucano.

El toreo es poesía pura

Finito lleva 29 años de alternativa, atesora arte en su quehacer y se lamenta de no estar en «mi» Córdoba para el 12 de octubre cuando se dé el mano a mano Morante-Ortega…

Bueno, y barro para adentro, tampoco hay un americano en la fiesta de la hispanidad que algo tenemos que decir en esta fecha tan señalada del 1492.

No se puede torear con mas temple, con tanta profundidad, despacito (como lo canta José Alfredo).

Con trazos geométricos perfectos con dos grandes toros de Zalduendo (honores al finado Fernando Domecq).

Ganadería formada en el siglo XVIII y que hoy es propiedad de un magnate y amoroso de la tauromaquia, el mexicano Alberto Bailleres.

Antequera, en su sevillanisima «pequeña MAESTRANZA» malagueña, se dio la corrida que prolonga «la gira de la reconstrucción».

Finito bordó de filigranas el toreo y su segundo «Doctor» fue indultado aunque «con pegas», salvedades pues escarbó…

Es decir un buen producto pero se cuestiona para ser un gran reproductor aunque muchas virtudes tuvo entre ellas embestir por abajo y con el hocico y repitiendo y «durando» una barbaridad.

Lo dije en otra sobre Finito que entró por Castella (que se fue del toreo activo hace unos días). Cómo este en «olor de santidad taurina», vamos a crujir y el toreo crujió y bajaron los duendes al ruedo de la hermosa plaza antequerana.

LUIS BOLIVAR

Muy bien con su primero. Estupendamente lo toreó con el capote (incluido el quite por verónicas).

Una tanda de naturales con mucho fondo en su primero y un trasteo elegante con tandas de mucha solvencia y un forzado «¡¡de cartel de toros !!».

Faena pulcra, medida, con «son»…

Pero falló con la espada (quizás tropezó con una banderilla e hizo guardia pues nunca se «quitó»o se salió de la suerte sino que entró por derecho… pero no pudo ser).

Su segundo, siendo bueno a secas, no tuvo esa emoción del de Finito pero sí a un Bolívar muy profesional, técnico, gustándose, «haciendo las cosas» como debe ser y con líneas en los muletazos muy encomiables..

¿Y lo mejor? La estocada. Una oreja

Antonio Barrera, representante de Zalduendo dijo que lo ocurrido hoy es la prolongación en manos mexicanas de lo que dejó don Fernando Domecq.

Es difícil que salga un toro como el tercero, cómo tuvo de clase, esa manera de colocar la cara y embestir con profundidad.

«Fue indultado en toda regla», matizó el torero – representante.

Dijo que «Doctor», el indultado, es el homenaje de la ganadería a todos los sanitarios que han luchado para salvar vidas en esta horrible pandemia. El toreo es poesía pura

Homenaje a los médicos taurinos. Historias del cirujano Rodrigo Rojas y su colega que salvó al «Rubio de San Diego» en Valladolid

El médico Rodrigo Rojas, por la derecha, el último de la segunda fila en el congreso internacional de cirujanos de Zacatecas

En la foto, nuestro «ángel guardián», Rodrigo Rojas, con el torero Moreno Muñoz en la clínica tras salvarlo de un cornalón en Puente Piedra.

Luis Maria Mariño Peñacoba, el cirujano que atendió la estremecedora cornada al Rubio de Santiago en la provincia de Valladolid, se formó en estas lides de salvar la vida de los toreros en el Carnaval del toro de Ciudad Rodrigo con su colega colombiano Rodrigo Rojas.

El torero cartagenero está fuera de peligro

HISTORIA CON FINAL FELIZ

Hace 4 años tras romperse un vallado en el encierro a caballo por la arremetida de dos toros que en esa carrera «loca» cornearon a un octogenario y a su hijo, cincuentón; dos «tabacazos» horrorosos y por lo que debieron urgentemente intervenir los dos médicos (Rojas y Mariño) a los que se sumaron el maestro Crespo y el Dr Hevia y a la final los 4 salvaron la vida del padre y el hijo, operación que fue el bautizo de fuego para «el atortolado» pero feliz Rodrigo pues como dicen los que se forman en el mundo de la aviación fue un buen «soleo» y despegue perfecto en esa profesión tan humana, tan sacrificada pero tan vital en la sociedad que son estos ángeles, los galenos taurinos.

El Dr. Crespo, maestro de maestros en cirugía taurina ha enseñado a dos generaciones que para fortuna del toreo, estàn vinculados al mundo del toro en los equipos médicos.

Vaya por ellos, los que se fueron, los que están y los que vendrán nuestro eterno agradecimiento. ¡¡¡ Hurra por ellos !!!


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