Category Archive : El prohibicionismo se impone

La industria animalista cabalga en su prohibicionismo.

La industria animalista la toma con los huevos

La industria animalista cabalga en su prohibicionismo. Una joven del partido Podemos en Andalucía espetó sin que se le frunciera el ceño: Montar a caballo es una explotación, y en Bogotá Andrea Padila planteó sobre los huevos:

«Buscamos que haya una mayor conciencia del consumidor a la hora de escoger los huevos (…) porque podríamos estar comprando huevos producidos en el sistema de jaula, que es el de mayor confinamiento».

Padilla declaró que para lograr este etiquetado solo será necesario poner un número en los empaques de los huevos.

Esta propuesta deberá ser aprobada antes de convertirse en realidad. 

Así que parte de lo que en Colombia somos se hizo con el caballo, las mulas y las yeguas en ese paso desde el páramo de Pisba para conquistar la libertad en el campo de batalla; y se abrieron caminos entre las cordilleras gracias al caballo.

MONTAR A CABALLO

“Montar a caballo es una de las formas de explotación ecuestre más usuales en el Estado español”.

Esta es la frase con la que la diputada andaluza por Córdoba de Adelante Andalucía Luz Marina Dorado, realizó su alegato de la industria animalista dentro de la Comisión de Turismo del Parlamento de Andalucía, donde algunos se quedaron atónitos al escuchar estas palabras.

“Es una actividad que no despierta tantas pasiones en contra como otras formas de explotación animal. Y quizás se debe a una racionalización moderna de un mito heredado desde antiguo y que consiste en la falsa creencia de que los caballos mantienen un tipo de vínculo mutualista, en el acervo cultural arábigo-islámico, el caballo recibía un trato mejor que el de otros animales. Sin embargo no es un vínculo no mutualista porque de las dos especies una no es libre, como sí ocurre en otras especies que conviven con el ser humano”.

La parlamentaria ha pedido una transformación de los espectáculos ecuestres con vocación turística para «readaptar el modelo turístico de ocio relacionado con animales porque va a ser una demanda cada vez más creciente al mismo nivel en que aumenta la conciencia de cómo se convive con los animales en el planeta; aunque hay que buscar opciones para que nadie que trabaje en las escuelas ecuestres pierda su empleo».

HISTORIA

El primer caballo domesticado: hace 5.500 años

Según los datos de algunas investigaciones, el Equus ferus se desplazó del este de Asia hace aproximadamente 160 000 años; y la domesticación se produjo inicialmente en la zona occidental de Eurasia hace unos 5500 años.

Y si os preguntáis que queda de estos caballos salvajes de la antigüedad, sabed que solo dos especies no domesticadas por el hombre consiguieron mantenerse con vida a pesar del trascurso de los años: Przewalski (Equus ferus przewalskii) y Tarpan (Equus ferus ferus)

Sin embargo, mientras que el Tarpan desapareció definitivamente a lo largo del siglo XIX;  el Przewalski casi se extinguió, pero en 1960 se favoreció su repoblación en Mongolia.

Y sin duda, mencionar la domesticación que comenzó hace unos 5500 años, implica hablar del uso que han hecho numerosas civilizaciones de su fuerza, nobleza y velocidad.

Gracias a sus habilidades y su porte, el hombre consiguió por primera vez desplazarse grandes distancias, asegurarse protección, y el caballo se convirtió en un símbolo de poder.

Tal y como afirma Ludovic Orlando, un investigador de la Universidad de Copenhague (Dinamarca): «La domesticación del caballo en la estepa póntica hace unos 5.500 años representa uno de los mayores puntos de inflexión en la historia de la humanidad».

¿Y LOS HUEVOS? DICEN LOS AVICULTORES

Al ser uno de los actores responsables de la nutrición de los colombianos, uno de los pilares del desarrollo de la avicultura ha sido su permanente innovación tecnológica, que ha permitido, entre otros hitos, mejorar las condiciones de las aves en granja y ofrecer dos alimentos, como lo son el pollo y el huevo, de manera más amplia y segura.

Radican proyecto en el Congreso para acabar con las corridas, el coleo, corralejas, tentaderos, becerradas, novilladas…

Se abrieron las sesiones ordinarias del Congreso y la industria animal volvió con su proyecto prohibicionista debajo del brazo y dispuesta a acabar no solo con la tauromaquia.

Juan Carlos Losada, Fabián Díaz, Inti Asprilla y José Daniel López, presentaron la iniciativa que busca:

“la prohibición de las prácticas taurinas en todo el territorio nacional, como expresiones de maltrato, crueldad y violencia”.

(Eso dicen ellos sin aportar argumentos).

“Se prohíbe el desarrollo de las actividades de coleo, corridas de toros, novilladas, corralejas, becerradas y tientas”, indica el proyecto de ley radicado en la Cámara de Representantes.

El proyecto indica que “el Gobierno Nacional , en el marco de sus competencias, tendrá un plazo de seis meses contados a partir de la expedición de la presente ley para garantizar programas efectivos de reconversión económica de las personas que se dediquen a las actividades relacionadas con la práctica taurina.

Es decir para que novilleros, toreros, rejoneadores, banderilleros, picadores, se conviertan en talabarteros, zapateros, cocineros…

¿Y al derecho a escoger libremente profesión y oficio?

La mira de la iniciativa de los congresistas busca según ellos, que no se utilicen animales en esas expresiones hoy consideradas como culturales, en los animales.

La denominada fiesta brava es una tradición con fuerte arraigo popular en muchas poblaciones de Colombia.

Pero en Medellín y Bogotá los alcaldes y los concejos promovieron acciones dirigidas a restringirla, generando un gran debate.

No es la primera vez que se radica un proyecto de esta naturaleza que no han cuajado en las dos cámaras legislativas.

La tauromaquia goza de protección bajo el amparo de la Ley 916 y pronunciamientos de la Corte Constitucional.

“Sin embargo, a diferencia de los trámites anteriores, en esta oportunidad el enfoque del proyecto, más que controvertir actividades culturales o determinar mecanismos de sustitución laboral, radica en los animales y en su condición de sujetos merecedores de una especial protección y del reconocimiento del derecho más básico de todos: el derecho a existir y a no ser sujetos a tratos crueles”.

Justifica el señor Losada.

¿TIENEN DERECHOS LOS ANIMALES?

A la pregunta «¿tienen derechos los animales?» suele referirse a una cuestión más complicada: si tienen un tipo de derechos similar a los derechos humanos, que no se conceden, sino que deben reconocerse.

Los derechos humanos son anteriores a las voluntades de los legisladores y les obligan a reconocerlos y encarnarlos en las legislaciones concretas. No es lo mismo conceder un derecho, cosa que podría hacerse o no, que tener que reconocerlo. 

A lo largo de su historia, la humanidad ha reservado el estatus jurídico de sujeto de derecho para personas naturales y personas jurídicas únicamente, aunque en ocasiones haya llegado a negársele a ciertos grupos humanos, como los esclavos, las mujeres, los inmigrantes, etc.

Y es así como cada uno de estos casos de discriminación ha tenido su correspondiente lucha histórica.

El debate en Colombia recomienza. Ya veremos

El Concejo de Bogotá desmonta las corridas

Se impone el prohibicionismo.

Así de claro.

En una sesión virtual del Concejo de Bogotá, el animalismo impuso la bota y aunque sabe que no puede prohibir las corridas, la desmontó de tal manera que la desfigura totalmente.

No se podrá cumplir ni con el tercio de varas, ni el de banderillas y la muerte del toro al prohibirse el uso del estoque.

A la empresa la obligan a pagar mas tributos y se pasa del 10 al 20 por ciento el llamado impuesto de pobres y a destinar de la parte publicitaria de los festejos un 30 por ciento para que informe del maltrato animal.

Reduce a 4 festejos al año las corridas en la plaza De Santamaría ( tres entre enero y febrero y una en agosto en lo que se llamó el Festival de Verano ).

Los concejales fueron repartiendo mentiras , medias verdades e infundios como el de que la ONU ya se pronunció por impedir el ingreso de los menores a las corridas por su carácter violento. Y nuevamente la monserga del maltrato, y ni una sola palabra de los ediles sobre el drama de los toros que se irán al matadero por la pandemia.

Con la cara de la poca verguenza , varios concejales dijeron que no era un proyecto prohibicionista pero, por ejemplo, no se podrá llevar la tradicional bota pues está prohibido el ingreso de licor.

En la propuesta que será votada en breve, los concejales en plenaria se pusieron de acuerdo para ponernos a los taurinos una camisa de fuerza que hará inviable la tauromaquia.

Una vez salga aprobado lo que apenas es un consenso de la mayoría del Concejo, tenemos recursos jurídicos ante los organismos competentes para impedir que estos nuevos censores impongan su visión del mundo.


  Utilizamos cookies para mejorar tu experiencia en nuestro sitio web. Al seguir navegando, aceptas el uso de cookies. Más información en nuestra política de privacidad.    Más información
Privacidad